Tipos y variedades de albahaca: características de la hierba
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Descripción
La albahaca es una planta herbácea anual de la subfamilia Nepetalaceae, familia Lamiaceae. Su raíz ramificada es superficial. El tallo es recto, tetraédrico, con numerosas ramas de hojas oblongas, de color verde o púrpura.
En junio, produce flores blancas o rosadas que atraen a diversos insectos polinizadores. Más adelante, en otoño, se pueden cosechar las semillas, pequeñas nueces de color marrón oscuro. Todas las partes de la planta, excepto la raíz, son ricas en aceites esenciales, solanina, vitamina P y alcanfor. Las hojas también son ricas en proteínas, azúcares y fibra.
Se utiliza mucho en platos de carne, salsas y conservas de invierno. Las hojas se recolectan para secar antes de la floración. En esta época, son especialmente ricas en aceites esenciales.
Vídeo "Visualizaciones"
En este vídeo aprenderás qué tipos de albahaca existen.
Tipos
Existen dos variedades de albahaca: verde y morada. Sin embargo, solo algunas variedades presentan una coloración intensa de uno de estos colores. El grupo de las moradas incluye plantas con todos los tonos de transición, desde el negro hasta el rojo. Las variedades verdes pueden presentar una coloración intensa en toda la planta o en los tallos, en todas las tonalidades de morado, y hojas que varían del verde al plateado debido a sus numerosas nervaduras moradas.
El aroma de algunas variedades de albahaca contiene notas de otras hierbas, como pimienta de Jamaica, clavo y limón. Los expertos afirman que existen 40 tipos diferentes de aromas de albahaca, magistralmente utilizados por los perfumistas. Quienes usan esta especia de forma más práctica destacan las siguientes notas: canela, clavo, pimienta, limón y menta.
En Tailandia, la albahaca con sabor a limón se usa para elaborar pastas de curry. Las variedades con sabor a canela son más comunes en México. La vibrante cocina georgiana también utiliza la albahaca morada, la albahaca picante (regan) y la más delicada albahaca verde (shashkalavi).
En cuanto al tiempo de maduración, puede ser temprana (35-45 días después de la germinación), de media estación (55-70 días) o tardía (75-90 días después de la germinación). Los tamaños incluyen variedades bajas (15 a 30 cm), medianas (30 a 60 cm) y altas (60 a 85 cm).
También existe la siguiente clasificación: grandes, en forma de cuchara, de hojas pequeñas y en forma de racimo.
Grande
Planta con tallo muy ramificado, que alcanza hasta 40 cm de altura. Sus hojas son grandes, finamente dentadas, verdes y con un aroma picante y especiado.
con forma de cuchara
Al parecer, el término proviene de la forma de las hojas, que, con su concavidad y forma ovalada, se asemejan a estos cubiertos.
De hoja pequeña
Esta categoría incluye variedades de albahaca de hojas pequeñas y crecimiento bajo, que a menudo se utilizan como planta de maceta.
Puchkova
Las variedades de esta especie se distinguen por su forma esférica, que se desarrolla en plantas bajas —de hasta 15 cm de altura— debido a la abundancia de hojas pequeñas y maravillosamente fragantes. Crecen tanto en macetas como en el jardín.
Siembra y cuidados
Todas las variedades de albahaca prefieren el calor. Por lo tanto, solo se puede plantar al aire libre cuando la tierra esté lo suficientemente caliente y haya pasado el riesgo de heladas. También se pueden sembrar las semillas directamente en el exterior, pero para una cosecha más rápida, es mejor cultivar plántulas.
En las regiones del sur del país, las semillas para plántulas se siembran a finales de marzo, mientras que en las regiones del norte se siembran en abril. En ambos casos, las semillas deben remojarse antes de la siembra. Son ricas en aceites esenciales y tienen un tamaño de partícula muy fino, lo que impide una germinación rápida. Primero, las semillas, atadas en un paño de algodón, se sumergen dos veces en agua a 30 grados Celsius (86 grados Fahrenheit) y se dejan allí durante 15 minutos.
El segundo remojo se puede combinar con la desinfección añadiendo unos cristales de permanganato de potasio al recipiente con agua. Prepare con antelación una mezcla de tierra con compost, humus y arena en proporción 4:2:1. Para eliminar los patógenos, colóquela en un horno precalentado durante 30 minutos. Elija un recipiente poco profundo (de 5 a 7 cm). Haga surcos poco profundos (1 cm), separados entre sí por 4 cm.
Las semillas se esparcen, se cubren con tierra y se riegan con un pulverizador. La caja se cubre con un material transparente, como vidrio o film transparente, y se coloca cerca de una fuente de calor. La temperatura ideal para la germinación es de 24 grados Celsius (75 grados Fahrenheit). Se recomienda levantar el vidrio diariamente para permitir la ventilación. Cuando aparezcan dos hojas verdaderas, las plántulas se trasplantan a macetas individuales o a una caja más grande, dejando una distancia de 5 cm (2 pulgadas) entre ellas.
Cuando aparezcan cinco hojas verdaderas, se pueden despuntar las plántulas para evitar que se estiren y acelerar la formación de ramas laterales. Una semana antes, se deben aclimatar las plántulas colocándolas al aire libre. El sistema radicular débil y superficial de la albahaca explica su alta demanda de suelo fértil y ligero. Por lo tanto, se debe remover la tierra previamente y enriquecerla con fertilizantes orgánicos y minerales.
Se pueden plantar en hileras separadas o junto a pimientos y tomates. La distancia entre plantas adyacentes debe ser de al menos 20 cm, y entre hileras, de 30 cm. Antes de plantar, riegue el hoyo y entierre las plántulas de 7 a 10 cm. Es mejor elegir un día nublado o al atardecer. El cuidado posterior consiste en regarlas regularmente y aflojar la tierra. También es importante eliminar los tallos florales para estimular el crecimiento de nuevos brotes.
En campo abierto, las semillas se siembran a la misma profundidad que las plántulas. El terreno se humedece y se cubre con plástico. El objetivo principal es mantener la humedad del suelo.
Enfermedades y plagas
La albahaca se ve afectada principalmente por enfermedades fúngicas:
- Marchitamiento por Fusarium. Los hongos atacan los vasos sanguíneos de la planta, envenenándola con sus toxinas. Los tallos jóvenes de albahaca se tornan marrones y se adelgazan. En las plantas maduras, la parte superior se ve afectada primero, seguida por las hojas inferiores, más maduras, que gradualmente se marchitan y se secan. La planta muere. La enfermedad se presenta en climas cálidos y húmedos.
- El moho gris forma lesiones secas de color marrón pálido, inicialmente en las hojas inferiores y extendiéndose gradualmente hacia las superiores. Las hojas afectadas se vuelven translúcidas y se cubren de una pelusa grisácea. Esta enfermedad prolifera en ambientes húmedos.
- La pierna negra ataca las plántulas. El hongo coloniza el cuello de la raíz, obstruyendo los vasos e impidiendo el suministro de nutrientes. Las raíces se vuelven blandas y negras. La enfermedad se desarrolla si el suelo para las plántulas no se preparó correctamente, con un pH inferior a 6, una estructura densa y exceso de humedad.

No se recomienda tratar la albahaca con fungicidas, ya que la vuelve no apta para el consumo humano. Por lo tanto, es importante centrarse en medidas preventivas.
- No cultivar el producto durante más de 2-3 años en un mismo lugar;
- No densifique la siembra;
- Espolvoree la albahaca con ceniza de árbol de hoja caduca de vez en cuando;
- regar moderadamente;
- Después de la lluvia y el riego, afloje la tierra para evitar la formación de costra;
- Ante los primeros signos de infección, retire la planta enferma junto con el cepellón.
La albahaca no es particularmente susceptible a las plagas. Los pulgones y los chinches de campo aparecen ocasionalmente en las plantas jóvenes, pero no causan mucho daño.
Vídeo "Creciendo"
Este vídeo te mostrará cómo cultivar albahaca correctamente.



