Plantación y cuidado de vides jóvenes
Contenido
Características de la variedad
¿Sueñas con que tu dacha parezca un antiguo castillo de cuento de hadas? Es fácil si sabes cultivar parra virgen, una vid ornamental que puede transformar por completo incluso una casa común. ¿O tal vez te gustaría cultivar parra virgen en un balcón, una galería o incluso en tu apartamento? ¡Sin problema! Sin embargo, esta última opción es más recomendable en Siberia, ya que evita que la planta se seque.
Esta uva ornamental variegada recibió su nombre de "madre" debido a su capacidad para formar frutos sin el proceso de polinización. En esta cultura, las vides verdes tienen valor ornamental; las flores de la planta no son particularmente atractivas; los frutos de esta variedad «señorita» tampoco tienen valor. Por lo tanto, las vides silvestres se utilizan principalmente en el diseño de jardines; su follaje decorativo adornará incluso la casa o el cenador más modesto.
La parra virgen se caracteriza por sus hojas puntiagudas, parecidas a las del arce. En verano, sus hojas son verdes, pero al acercarse el invierno, se tornan de un rojo carmesí intenso. Antes de plantarla, asegúrese de que haya un soporte vertical o enrejado adecuado cerca, ya que las enredaderas necesitan dónde sujetarse. Esta variedad crece con vigor, por lo que deberá podarla regularmente; de lo contrario, ocupará demasiado espacio.
Aterrizaje
Existen diversas maneras de cultivar parra virgen, pero si tienes poco tiempo, prueba a sembrarla. Puedes sembrarla en cualquier época del año, pero si no la siembras en otoño, las semillas necesitarán estratificación.
Elegir el momento y el lugar
El Parthenocissus triostrum es una de las pocas variedades de Parthenocissus que prospera tanto a pleno sol como en semisombra. Sin embargo, si se desea que su follaje adquiera un vibrante color carmesí en otoño, es mejor plantarlo en un lugar soleado. Además, las plántulas sembradas en laderas orientadas al sur crecen más rápido y desarrollan un follaje más denso. Las plantas sembradas en zonas expuestas a vientos fuertes no prosperarán, ya que su crecimiento rápido se verá limitado. No se recomienda plantar cerca de tuberías de agua ni cables. Un lugar ideal es cerca de un cobertizo o cenador, una cerca o una casa. Las uvas silvestres (también conocidas como uvas doncellas) pueden crecer en cualquier tipo de suelo, pero su sistema radicular se desarrolla mejor en suelos francos, neutros y ligeramente alcalinos.
Instrucciones paso a paso
Si opta por propagar el cultivo por semilla, lo mejor es hacerlo en otoño. Las semillas preparadas deben colocarse en tierra previamente aflojada y fertilizada (a no más de 1 cm de profundidad) y regarse. Los esquejes son un método menos laborioso.
En este caso, es necesario saber cómo realizar correctamente los esquejes: cada esqueje debe contener al menos cuatro yemas, y los esquejes de vid jóvenes deben plantarse a suficiente profundidad para que al menos dos yemas queden por encima del suelo. Los esquejes deben regarse abundantemente y la tierra debe mantenerse ligeramente húmeda. Esto garantizará plántulas fuertes.
Cuidado de las vides jóvenes
Así que, tus primeras vides han sido plantadas con éxito y ya estás deseando disfrutar del paisaje variado característico de esta variedad. Ahora es el momento de aprender a cuidarlas adecuadamente. ¿Puedes simplemente olvidarte del esqueje plantado durante un tiempo, esperando que pronto brote una vid frondosa? Resulta que, casi con toda seguridad, así será.
Secretos del cultivo
Una vez plantadas las vides jóvenes correctamente y a tiempo, su cuidado posterior consiste en riego regular, fertilización periódica e inspección minuciosa para prevenir enfermedades y plagas. Otro paso esencial es el control de malezas y la poda estacional. Además, las vides jóvenes necesitan soporte adicional, ya que aún no tienen zarcillos fuertes.
Las vides jóvenes, al igual que la mayoría de los árboles y arbustos ornamentales, necesitan ser abonadas: al comienzo del verano y durante el período de crecimiento activo.
Trasplante de uvas
A veces, el desarrollo de una vid no sigue el curso esperado y es necesario trasplantarla. Lo ideal es trasplantar las vides jóvenes (vides ya cultivadas) lo antes posible, aunque son tan fáciles de cuidar que incluso ejemplares de cinco años pueden moverse con cierta habilidad. El trasplante de vides comienza preparando un hoyo: debe tener el mismo tamaño que el cepellón y el que lo rodea, pero ser ligeramente más profundo que el anterior. Se coloca una capa de drenaje en el fondo, seguida de arena y, finalmente, una mezcla rica en nutrientes de tierra y fertilizante. Después de 14 días, cuando la tierra del hoyo se haya asentado ligeramente, se debe podar la planta a un tamaño adecuado para el trasplante. Simplemente se introduce la vid en el nuevo hoyo y se rellena con tierra, regándola después.
Podar una planta
Durante los primeros años tras su plantación, las vides jóvenes no resultan especialmente atractivas en el diseño de jardines. Sin embargo, a medida que la planta comienza a desarrollarse activamente, es fundamental podarla con regularidad para establecer una estructura adecuada y guiar los brotes en la dirección deseada. Esto se puede hacer con tijeras de podar comunes antes de que los brotes se endurezcan, sujetándolos con cuidado en la posición deseada y eliminando los brotes sobrantes. Una vez que la estructura de la planta esté completamente formada, solo será necesario realizar una poda sanitaria en primavera u otoño para evitar que la planta se convierta en un arbusto enorme y desgarbado.
control de plagas y enfermedades
Según Wikipedia, la parra virgen es relativamente resistente a las enfermedades y rara vez atacada por plagas, por lo que rara vez se plantea la cuestión de cómo eliminar estos problemas. Sin embargo, un cuidado inadecuado puede debilitar incluso a las plantas más fuertes. Por ejemplo, si el suelo está demasiado húmedo, la planta puede ser susceptible a infecciones por hongos, como lo indica el estado del follaje. En este caso, elimine todas las hojas afectadas y reduzca el riego al mínimo. Si aparecen plagas repentinamente en su parra virgen, no se preocupe; puede combatirlas de forma segura con un insecticida.
Preparándonos para el invierno
No necesitarás ningún cuidado especial en otoño antes del invierno. La parra 'Lágrimas de Doncella', como también se la conoce, resiste bien el invierno sin protección adicional. Si te preocupa que la planta sufra, puedes cubrir el cepellón con mantillo, separar las ramas de sus soportes y cubrirlas con ramas de abeto. Estos son todos los retos que la parra 'Lágrimas de Doncella' puede presentar para un jardinero. Como puedes ver, cuidar de esta planta no es particularmente complicado. Anímate a plantar esta planta tan delicada y no tendrás que preocuparte por lágrimas de decepción.
Vídeo "Uvas doncellas"
En este vídeo escucharás una descripción de las uvas jóvenes.






