¿Qué se debe hacer y por qué las hojas de la vid se están volviendo amarillas y secas?

Hoy en día, ningún huerto puede prescindir de la vid. Y sin duda, todo viticultor, especialmente en regiones con climas inestables, se ha enfrentado al problema del amarilleamiento y secado de las hojas. Las causas del secado de las hojas de la vid pueden variar desde enfermedades hasta malas prácticas agrícolas. Por lo tanto, antes de actuar, es importante comprender la causa del secado de las hojas y, a partir de ahí, decidir qué hacer para salvar las vides y la futura cosecha.

Razones principales

Las vides son plantas muy exigentes y amantes del calor; requieren mucho sol, pero también prosperan con la humedad. El riego insuficiente, que puede provocar sequedad incluso en la capa superior del suelo, afecta inmediatamente a las hojas y es la causa más común de que se sequen. Si la planta no se riega con regularidad, las raíces pequeñas se secan, los nutrientes dejan de llegar a los tallos y la planta comienza a marchitarse.

Un cuidado inadecuado afecta el estado de las hojas de la vid.

Otra razón para el amarilleamiento de las hojas puede ser la falta de luz solar. Si el viñedo está a la sombra o el tiempo está nublado durante mucho tiempo, conviene estar preparado para que las hojas empiecen a amarillear gradualmente. La vid tampoco tolera el frío, la alta humedad ni las fluctuaciones de temperatura.

En estas condiciones, la planta deja de desarrollarse con normalidad, las hojas se tornan amarillas, se secan y se cubren de una capa viscosa. Estas son las causas más comunes que se pueden eliminar con los cuidados adecuados. Sin embargo, existen causas más graves de secado de las hojas de la vid que requieren la intervención inmediata del jardinero. Estas se tratarán más adelante en este artículo.

Enfermedades

Cualquier enfermedad que afecte a la vid, sus primeros síntomas suelen incluir el amarilleamiento y la muerte de las hojas. Esto se debe al debilitamiento general de la planta y a su tendencia a conservar energía. Las siguientes enfermedades pueden causar amarilleamiento y caída de las hojas:

La marchitez por Verticillium es una enfermedad causada por hongos.

  1. Verticilosis. Enfermedad fúngica que ataca inicialmente el sistema radicular. Las raíces dañadas no pueden transportar nutrientes, lo que provoca que las hojas se decoloren, se sequen por los bordes y se marchiten. En 2 o 3 años, un viñedo infectado puede morir por completo.
  2. El mildiú es uno de los hongos más peligrosos para la vid. Se manifiesta como manchas claras en la superficie superior de la hoja y una capa blanca o marrón en la inferior. Las esporas del hongo se transmiten rápidamente a las uvas: los racimos verdes se marchitan y pueden secarse, mientras que los maduros simplemente se pudren.
  3. La clorosis (un trastorno en la formación de clorofila) se desarrolla con mayor frecuencia en suelos carbonatados, donde la absorción de nutrientes, incluido el hierro, se ve afectada. Las hojas afectadas adquieren un color claro y se caen en masa. Si la clorosis no se trata a tiempo, las vides jóvenes dejan de crecer y las uvas desarrollan un sabor desagradable.
  4. El moho gris es otra enfermedad fúngica que explica por qué las uvas se secan. Este hongo prolifera en ambientes cálidos, por lo que está activo desde la primavera hasta la vendimia. La pudrición puede dañar todas las partes de la vid. Se manifiesta como una capa grisácea y algodonosa, y provoca la caída de las hojas. Las bayas infectadas se pudren.

Plagas peligrosas

Ácaros en las uvas

Los ácaros, los pulgones y otras plagas microscópicas causan daños significativos a las uvas.

Se ubican en el envés de la hoja, por lo que no siempre son visibles. Se alimentan de la savia, lo que provoca que las hojas se adelgacen y se sequen. Los ácaros se identifican por la fina telaraña a lo largo del pecíolo, una capa pegajosa y manchas rojizas en las hojas. Si se detectan estos síntomas, se debe tratar el viñedo con acaricidas. Para evitar recurrir a medidas tan drásticas, inspeccione los arbustos con regularidad.

Falta de fertilizantes

Al cultivar uvas en suelos pobres, los viticultores suelen encontrarse con deficiencias minerales. Sin embargo, esta deficiencia también puede ocurrir en suelos fértiles, especialmente cuando el viñedo es viejo y los fertilizantes se aplican de forma irregular. La principal razón por la que las hojas de la vid se secan y pierden su color original es la deficiencia de nitrógeno.

La deficiencia de ciertos micronutrientes también provoca decoloración en las hojas. Si el suelo es deficiente en boro o magnesio, las zonas intervenales de la hoja se tornan amarillas, luego marrones y se secan. Las nervaduras, en cambio, permanecen verdes. Un borde seco en los márgenes de la hoja indica una deficiencia de potasio.

La falta de fertilizante afecta el estado de la planta.

Tratamiento y prevención

Plantar en el lugar adecuado puede ayudar a evitar muchos problemas en el cultivo de la vid. Un viñedo bien iluminado y ventilado, ubicado en una zona elevada o con orientación sur, aumentará inmediatamente la producción y la resistencia a las enfermedades. También conviene tener en cuenta el clima de la región y plantar variedades menos exigentes y resistentes al frío y a las enfermedades.

Si la enfermedad ya se ha manifestado en las vides y las hojas, el tratamiento debe ser inmediato. Cualquier enfermedad fúngica puede tratarse con fungicidas o antifúngicos que contengan cobre. Una solución de bicarbonato de sodio (80 g/10 l de agua) es eficaz contra el moho gris en sus primeras etapas. Los biopreparados como Gaupsin y Fitoverm brindan una protección integral al viñedo contra plagas y enfermedades.

El producto biológico "Fitoverm" ayudará a combatir plagas y enfermedades.

El cuidado adecuado y las medidas preventivas tienen un efecto beneficioso en la salud del viñedo. El aflojamiento regular del suelo, especialmente después del riego, mejorará la circulación del aire y evitará el encharcamiento, lo que reducirá la probabilidad de enfermedades fúngicas.

En primavera, conviene rociar las vides con caldo bordelés al 1%, una medida preventiva eficaz contra diversas enfermedades. En otoño, retire y queme por completo los restos vegetales, lo que también destruirá las esporas de hongos. Para evitar cualquier problema, inspeccione las vides con regularidad. Así no tendrá que preocuparse por el secado de las hojas de la vid, qué hacer al respecto ni cómo tratar esta peligrosa enfermedad.

Vídeo: "¿Qué hacer si las hojas de la parra se ponen amarillas?"

Este vídeo te mostrará cómo combatir el amarilleamiento de las hojas de la vid.

Pera

Uva

Frambuesa