Ventajas y desventajas del cultivo hidropónico de tomates

Es difícil encontrar a alguien a quien no le gusten los tomates: las ensaladas de tomate y pepino, en sus diversas variantes, se sirven en todos los hogares. Desafortunadamente, en invierno, los tomates pierden casi todo su sabor fresco, agridulce, e incluso en verano, se pueden encontrar tomates cargados de fertilizante. Existe una solución incluso para quienes no tienen jardín o una pequeña finca: cultivar tomates hidropónicamente en casa. Un sistema hidropónico te permitirá disfrutar de tomates durante todo el año, y te explicaremos cómo hacerlo.

Descripción del método

Los tomates son hortalizas con raíces poco profundas, lo que los hace aptos para el cultivo hidropónico. Este método consiste en llenar pequeños recipientes con una mezcla lavada y desinfectada compuesta de roca y grava fina trituradas, escoria, musgo, arena gruesa, arcilla expandida, fibra de coco y lana mineral. Estos recipientes se colocan dentro de otros más grandes, que luego se llenan con una solución hidropónica. La solución nutritiva se puede comprar en una tienda especializada o preparar en casa. Se utilizan diversos fertilizantes complejos, añadiéndolos según sea necesario. Es importante no superar el nivel de pH permitido (6,0–6,3).

Cultivo hidropónico de tomates

La temperatura debe mantenerse entre 20 y 24 grados, pero no por debajo de 17 grados. Para favorecer la fructificación, aumente la temperatura unos grados. La temperatura del suelo también debe mantenerse alrededor de los 20 grados Celsius. Un descenso brusco de la temperatura congelará las raíces, lo que afectará directamente al desarrollo y la producción de la planta. Un aumento brusco puede provocar que la tomatera pierda sus flores. Para asegurar el desarrollo de los tallos y las raíces, retire periódicamente los recipientes pequeños. Cuando las raíces comiencen a asomar por los orificios de drenaje, reduzca el volumen de la solución en el sistema hidropónico para crear una cámara de aire de 5 a 7 cm.

Elegir una variedad de tomate

La elección de la variedad de tomate depende de tus preferencias. Los sistemas hidropónicos son aptos para cultivar cualquier variedad, pero las variedades de invernadero y de maduración temprana suelen producir mayores cosechas. Gavrosh, Druzhok F1 y Alaska son ideales. No requieren entutorado, poda ni formación de tallos, y rara vez son susceptibles a enfermedades virales. Los frutos maduran en poco más de dos meses. La variedad Bon Appétit, de crecimiento en racimo, resistente a enfermedades y con frutos grandes y de alta producción, también es una buena opción.

Variedad de tomate popular Alaska

Lo que necesitas para cultivar

Como se mencionó anteriormente, necesitará recipientes pequeños y grandes y un sustrato especial.

Dado que el sistema requiere una monitorización constante del nivel de líquido y la conductividad de la solución nutritiva, necesitará adquirir un indicador de nivel de líquido y un conductímetro. La conductividad de la solución debe estar entre 2 y 3 mS; cuando supere este rango, deberá cambiarse. Para tomates hidropónicos, puede adquirir la solución necesaria, pero si piensa prepararla usted mismo, la proporción de minerales debe ser exacta al gramo. De lo contrario, la solución podría dañar la planta o incluso matarla. La mezcla debe seleccionarse según la etapa de crecimiento del cultivo.

Los tomates necesitan luz intensa para asegurar un buen crecimiento y fructificación. Esto se puede lograr utilizando lámparas fluorescentes o ultravioleta.

El sistema en sí puede equiparse con características como un sistema de película nutritiva, riego por goteo e inundación periódica. Si el sistema no incluye una bomba para regar las raíces con una solución, se puede sustituir por una bomba de acuario estándar.

Los tomates necesitan una iluminación intensa.

Siembra y cultivo de plántulas

Primero, las semillas se remojan brevemente en una solución de permanganato de potasio, se enjuagan y se siembran para su germinación. Se pueden usar tacos especiales, pero también sirve una esponja o algodón empapado en la mezcla de nutrientes. No se recomienda regar con frecuencia; basta con hacerlo cada dos días. La temperatura debe rondar los 21-22 grados Celsius. Se cultivan de esta manera durante unos 10 días. Luego se trasplantan a cubos especiales. Después de tres semanas, los cubos se transfieren a una bandeja previamente desinfectada y se riegan abundantemente. Finalmente, las plántulas se plantan en el sistema, teniendo en cuenta el espacio necesario para cada una.

Atención adicional

Elegir la solución adecuada para el sistema es crucial, ya que los tomates obtienen todos sus nutrientes de ella. Si adquirió una solución ya preparada, simplemente dilúyala con agua siguiendo las instrucciones. Una concentración baja afectará el rendimiento de la planta, mientras que una alta puede quemar y dañar las raíces. Un ambiente ligeramente ácido es óptimo para el crecimiento del tomate. Puede acidificar la solución con hidróxido de potasio, y el ácido fosfórico ayudará a reducir la acidez.

La planta debe crecer verticalmente.

Si has elegido una variedad que requiere soporte, tendrás que entutorarla cuando los arbustos alcancen una altura superior a 20 cm. Las variedades de porte bajo también requieren soporte. Los tomates hidropónicos se polinizan artificialmente. Lo mejor es usar un pincel pequeño y suave para transferir el polen de la flor masculina a la femenina. Otros métodos pueden resultar ineficaces debido a la humedad ambiental.

La planta debe crecer verticalmente, por lo que deben eliminarse los brotes laterales.

Ventajas y desventajas de la hidroponía

Este método de cultivo de tomates tiene muchas ventajas:

  • ahorro de espacio, fertilizante y agua;
  • rápido crecimiento, completa absorción de nutrientes por la planta;
  • Ahorro de tiempo y mantenimiento simplificado;
  • Alto rendimiento y calidad de tomates.

La hidroponía produce altos rendimientos y tomates de alta calidad.

Las desventajas incluyen:

  • costos de materiales para la compra e instalación del sistema;
  • posible aparición de enfermedades;
  • la aparición de plagas.

Una solución de mala calidad también puede provocar deformación de la fruta, daños en las raíces y pérdida de color. Sin embargo, aún así merece la pena intentarlo.

Vídeo: "Cultivo de tomates en hidroponía"

Este vídeo te mostrará cómo cultivar tomates hidropónicamente.

Pera

Uva

Frambuesa