Qué hacer si las hojas de la remolacha se ponen amarillas: causas y medidas de control
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Razones principales
Es bien sabido que cualquier desviación de las prácticas agrícolas y de cuidado adecuadas en el cultivo de hortalizas se manifiesta primero en sus hojas y brotes. La remolacha es una prueba más de ello. Si sus hojas se tornan amarillas, debe investigarse la causa. De lo contrario, la cosecha será inferior a la esperada para la variedad en cuestión.
La aparición de puntas amarillentas puede deberse a las siguientes razones:
- Suelo poco húmedo. La remolacha es un cultivo que requiere mucha humedad. El riego abundante y regular es especialmente importante durante la formación de las raíces. Se necesitan hasta 15-20 litros de agua por metro cuadrado de cultivo;
- Fertilización incorrecta. Las plantas suelen reaccionar a la deficiencia de nitrógeno. Los primeros signos de deficiencia de nitrógeno son hojas más pequeñas y largas, que posteriormente comienzan a ponerse amarillas;
- Daños a los cultivos causados por plagas o microorganismos patógenos.
De las causas mencionadas, las enfermedades son la más peligrosa. Tras la cosecha, es imposible determinar visualmente si cada tubérculo está sano. Almacenar remolachas infectadas durante el invierno puede provocar rápidamente la pérdida de prácticamente todos los tubérculos. Incluso un solo tubérculo infectado puede propagar la infección a todas las demás frutas y verduras almacenadas en la bodega.
Los siguientes factores pueden desencadenar el desarrollo de enfermedades:
- tiempo lluvioso prolongado;
- Rocío intenso que suele caer temprano por la mañana durante la segunda mitad del verano. Esto se debe al descenso de la temperatura del aire durante la noche.
Estas condiciones climáticas crean un entorno ideal para el desarrollo y la propagación de patógenos causantes de numerosas enfermedades, especialmente las fúngicas. La parte aérea de las plantas es siempre la primera en reaccionar ante la presencia de microflora patógena.
Además, la deficiencia de boro en el suelo puede provocar enfermedades en los cultivos de remolacha. Muchos horticultores consideran que añadir este mineral al suelo es una medida preventiva eficaz contra muchas enfermedades de este cultivo.
Cabe destacar que el amarilleamiento de las hojas puede deberse al envejecimiento natural. Esto suele ocurrir al final del ciclo de cultivo, cuando se acerca la época de cosecha.
Las hojas también pueden estar simplemente quemadas por el sol. Esto ocurre cuando las plantas no se regaron adecuadamente.
Vídeo "Las sutilezas del crecimiento"
En este vídeo aprenderás cómo cultivar remolachas correctamente.
Falta de humedad
La causa más común del amarilleamiento de las hojas de la remolacha es el riego inadecuado. Más concretamente, la humedad insuficiente del suelo.
Este cultivo requiere un riego máximo durante el período en que las plantas comienzan a formar raíces.
Síntomas de humedad insuficiente en el suelo:
- las hojas se hacen más pequeñas;
- Su color adquiere gradualmente un tono amarillento;
- Al cabo de un tiempo se caen.
La deficiencia de nitrógeno produce síntomas similares. Sin embargo, las hojas se alargan y adquieren un color amarillento pálido. El amarilleamiento comienza a extenderse desde las nervaduras hasta los bordes de la lámina foliar.
La falta de humedad se produce en las siguientes situaciones;
- Riego infrecuente e insuficiente. Esta situación es especialmente común cuando los jardineros solo visitan su parcela los fines de semana. En este caso, cubrir el suelo con mantillo es esencial para asegurar la retención de humedad. El riego frecuente también es esencial durante los fines de semana;
- escasas precipitaciones;
- Clima cálido y seco.
En estas situaciones, existe un alto riesgo de que el follaje se ponga amarillo. Por lo tanto, si se presentan estas condiciones climáticas, es necesario reconsiderar el régimen de riego de las plantas.
Enfermedades
Un cuidado deficiente suele provocar el desarrollo de enfermedades en hortalizas y cultivos de jardín. Por lo tanto, si la remolacha no se cuida adecuadamente, el riesgo de que microorganismos patógenos infecten los cultivos es muy alto.
Las remolachas suelen sufrir las siguientes enfermedades:
La roya se manifiesta con la aparición de manchas redondas de color naranja, de 2 a 6 mm de diámetro, en las hojas. Al cabo de un tiempo, se forman pequeños puntos de color marrón claro en el haz de la hoja. Simultáneamente, se desarrollan receptáculos de esporas con forma de copa en el envés. Tras aproximadamente 10-12 días, se forman uredinios (pústulas de color marrón amarillento), dispuestos en círculos concéntricos. Con el tiempo, la enfermedad se extiende a los tallos y pecíolos.
Esta enfermedad suele desarrollarse a principios de verano o finales de primavera. Inicialmente ataca las hojas jóvenes, interrumpiendo su proceso de fotosíntesis. Como resultado, las hortalizas de raíz se vuelven menos dulces.
Al cosechar plantas afectadas por la roya, se deben seguir los siguientes pasos:
- Los brotes se cortan. Se eliminan desde la base;
- Todos los brotes podridos se cortan hasta llegar al tejido sano;
- Todas las heridas deben desinfectarse con una solución al 1% de sulfato ferroso y arcilla;
- Los restos de plantas cortadas deben enterrarse en el suelo a una profundidad de al menos 0,5 m;
- Tras la cosecha, se debe aplicar una suspensión de los siguientes preparados: oxicloruro de cobre al 90 % (3,2-4 kg/ha), cuprosán al 80 % (2,4-3,2 kg/ha), etc. Estos preparados también son eficaces para el control de la cercospora y el mildiú velloso. Si el clima es húmedo, se recomienda repetir la aplicación a los 15-20 días. El radio de aplicación debe ser de al menos 5 m.

Para fumigar los cultivos se puede utilizar:
- suspensión al 3% de oxicloruro de cobre al 90%;
- 1% de mezcla bordelesa;
- Suspensión al 0,4% de zinceb al 80%.
Cabe destacar que no se pueden pulverizar las plantas de semillas durante la floración.
La segunda enfermedad que afecta con frecuencia a la remolacha es el amarilleamiento. Está causada por un virus transmitido por los pulgones. Las malas hierbas son la fuente de infección.
La enfermedad se manifiesta con un amarilleamiento de las hojas inferiores y medias. El amarilleamiento comienza en el ápice y luego se extiende por los bordes y las nervaduras principales. El color verde persiste durante un tiempo prolongado en la base de la lámina foliar. Las hojas infectadas se vuelven más quebradizas y densas, y también aumentan de anchura. Una masa viscosa amarilla se acumula en los tubos cribosos. Si no se toman medidas de control, la sustancia viscosa llega a las raíces de la planta, lo que puede ocasionar pérdidas de rendimiento de hasta un 3 %.
Lo único que ayudará a proteger las remolachas del amarilleo es el deshierbe regular, así como el control de los principales vectores del patógeno: los insectos.
Plagas
Las plagas de insectos suelen ser las responsables del amarilleamiento de las hojas de la remolacha. Transportan microflora patógena que favorece el desarrollo de enfermedades.
Los pulgones de la remolacha azucarera atacan frecuentemente este cultivo. Emergen en mayo y pueden producir hasta diez generaciones durante el verano. Las larvas y los adultos destruyen las plantas al succionar su savia. Como resultado, las hojas inferiores se deforman y se enrollan, lo que provoca el amarilleamiento del limbo y el enrollamiento del follaje. Las hojas pierden elasticidad y comienzan a marchitarse. En clima seco, se secan por completo. Esta situación ralentiza el crecimiento de la planta y reduce la probabilidad de una cosecha abundante. Por lo tanto, tan pronto como se detectan estas plagas, es necesario tomar medidas preventivas. Se pueden utilizar insecticidas y remedios caseros (como una infusión hecha con cáscaras de cebolla, hojas verdes de patata o hojas de diente de león) para controlar los pulgones.
Los enemigos naturales de los pulgones son las larvas de mariquita y los escarabajos. Por lo tanto, no deben ser ahuyentados de los canteros.
Además de los pulgones, las remolachas son atacadas por las siguientes plagas:
- pulga de la remolacha;
- mosca de la remolacha;
- carey remolacha;
- Crumble de remolacha.
Para evitar que las enfermedades y las plagas afecten a los cultivos de remolacha, es necesario realizar un tratamiento preventivo de las plantas.
Prevención
La prevención de la remolacha contra insectos y enfermedades comprende:
- cumplimiento de las normas de rotación de cultivos;
- deshierbe regular;
- cuidado adecuado;
- eliminación de restos vegetales de los parterres;
- Tratamiento de plantas con remedios caseros y fungicidas sistémicos.
Ahora ya sabes por qué las hojas de la remolacha se ponen amarillas y qué hacer al respecto. Recuerda que tomar medidas preventivas adecuadas y a tiempo te permitirá obtener una cosecha abundante, sana y dulce de remolacha.
Vídeo "Enfermedades"
En el vídeo aprenderás sobre las enfermedades de la remolacha.



