Pulverización de grosellas en primavera contra las plagas
Contenido
Cómo y con qué rociar
En cuanto la nieve comience a derretirse a principios de primavera, conviene tratar las ramas de los groselleros con agua hirviendo. También se puede utilizar una solución salina preparada con un kilogramo de sal por cada cubo de agua. Es fundamental respetar estrictamente la proporción recomendada. De lo contrario, los groselleros podrían quemarse.
Una semana después del primer tratamiento, se debe rociar el arbusto de bayas con Intavir. Para el cuidado de la planta, utilice remedios caseros, incluyendo diversas tinturas. Estas soluciones deben aplicarse semanalmente según un programa específico.
En la tercera semana de vida, la planta se trata con una infusión de gordolobo. Esta solución debe prepararse con antelación. Para ello, se debe dejar fermentar el estiércol, previamente diluido en agua. Solo después de esto se pueden tratar las bayas. La proporción de gordolobo y agua es 1:1 (se recomienda usar medio cubo).
El estiércol de caballo es eficaz para el control de plagas. Aplique una palada por planta en primavera.
Vídeo: "Cómo pulverizar las grosellas en primavera"
Este vídeo te mostrará cuál es la mejor manera de pulverizar las grosellas en primavera.
Métodos de control de plagas
La fumigación de los arbustos de grosella en primavera contra las plagas es específica. El producto y la dosis se seleccionan en función de la plaga específica que ataca las bayas.
Los ácaros de las yemas de la grosella se alimentan vorazmente de estas frutas. Una vez que aterrizan en la planta, se instalan firmemente en las yemas, provocando que estas se agranden considerablemente. Por lo tanto, es bastante fácil distinguir entre yemas sanas y enfermas. La principal tarea del jardinero en este caso es detectar rápidamente las yemas infectadas e impedir que se abran. De lo contrario, numerosos parásitos jóvenes emergerán de las yemas y causarán daños importantes a la cosecha.
Actuar a tiempo ayudará a prevenir que esto se agrave. Deben tomarse las primeras medidas en cuanto aparezcan los primeros síntomas de la enfermedad. El mejor resultado se consigue eliminando las partes afectadas. Tras retirarlas del arbusto, deben quemarse.
Para mejorar la eficacia del control de plagas, rocíe el cultivo con una solución de azufre coloidal o malatión. Ciertos productos químicos y caldos bordeleses también son eficaces.
Si la temperatura del aire no supera los 10 °C el día del tratamiento, las plantas deben cubrirse con film transparente después del mismo. El tratamiento debe repetirse a los 10 días.
Durante la primavera, las grosellas son atacadas por pulgones. Entre los signos de la presencia de este parásito se incluyen arrugas y deformaciones en los bordes de las ramas. Además, se pueden observar a simple vista grupos de pequeños insectos verdes en el envés de las ramas.
Se obtendrán buenos resultados en la lucha contra los pulgones o sus huevos tratando los arbustos con una solución de Nitrafen antes de que se hinchen los brotes.
Los extensos daños en las hojas de las bayas son consecuencia de un ataque de ácaros. El insecto también reside en el envés de la hoja. Para eliminarlo, se deben retirar las hojas dañadas del arbusto y quemarlas. Estas medidas son especialmente efectivas si se combinan con la aplicación de una solución de malatión.
Métodos para combatir las enfermedades
Lamentablemente, las grosellas, como cualquier otro cultivo de huerto, no solo pueden ser atacadas por microorganismos dañinos, sino que también pueden sufrir ciertas enfermedades. Por lo tanto, para evitar perder toda la cosecha, lo mejor es tratar las plantas en primavera.
¿Con qué debo rociar las grosellas en primavera? La respuesta a esta pregunta depende directamente del tipo y la naturaleza de la enfermedad. Además, la mejor manera de proteger sus plantas es saber no solo cómo eliminar las plagas y enfermedades, sino también cómo prevenirlas.
Las enfermedades causadas por ciertos hongos o virus pueden dañar significativamente los cultivos de bayas. Las grosellas son particularmente susceptibles a los efectos de la antracnosis y el oídio.
Los jardineros observan cada vez más señales de diversas enfermedades en muchos cultivos. Estas enfermedades pueden afectar tanto a arbustos como a árboles. El tratamiento debe comenzar de inmediato. Si no se actúa con prontitud, podría perder toda la cosecha de frutos rojos.
¿Cómo se deben fumigar las grosellas para protegerlas del oídio? En este caso, lo mejor es tratar el cultivo con una solución de nitrafen a principios de primavera. Durante la floración, no se deben tocar las plantas, pero una vez que la fruta empieza a madurar, se deben tratar los arbustos con una solución de Karatan o Benlat.
Si el arbusto está gravemente afectado, conviene repetir el tratamiento una semana después del primero.
La antracnosis es una enfermedad fúngica que afecta las hojas de la planta. Suele presentarse en verano, pero conviene tomar las primeras medidas para combatirla en cuanto suben las temperaturas, a principios de primavera.
Para combatir y prevenir la enfermedad, en primavera, rocíe las grosellas y el suelo circundante con Nitrafen, o más precisamente, con su solución. Antes de la floración, trate el cultivo con una solución de azufre coloidal. Repita el procedimiento un par de semanas después.
Prevención
Como medida preventiva, conviene proteger las plantas de enfermedades y plagas. Esto simplificará considerablemente su cuidado. Las medidas preventivas deben tomarse inmediatamente después del deshielo. También es importante completar los tratamientos antes de que los brotes comiencen a hincharse.
A principios de la primavera, mientras las bayas aún están en reposo vegetativo, conviene podar el arbusto. Elimine las ramas enfermas, secas o dañadas. Preste especial atención al proceso de poda y evite dejar tocones. Es a través de estas pequeñas ramas en brote que la enfermedad puede propagarse por todo el árbol.
Al cuidar las bayas, es fundamental retirar la capa superior de tierra cerca de las raíces. Cualquier resto acumulado en esta zona debe quemarse. En la mayoría de los casos, los microorganismos patógenos proliferan cerca de las raíces, creando las condiciones más favorables para bacterias e insectos.
Cuando las plantas entran en la fase vegetativa, conviene añadir nitrógeno al suelo, lo cual tiene un efecto beneficioso en la formación de los ovarios.
Para prevenir enfermedades, conviene elegir para la siembra aquellas variedades de bayas que sean particularmente resistentes a enfermedades y parásitos.
A veces, ni siquiera un cuidado meticuloso y bien organizado de los cultivos puede proteger a las plantas de parásitos y enfermedades. Las pérdidas de cosechas también pueden deberse a otros factores. Sin embargo, siempre conviene monitorear las plantas y descartar cualquier posible enfermedad.
Por lo tanto, es importante prestar mucha atención a las enfermedades y plagas actuales. Esta es la única manera de proteger su cosecha de la ruina.
Vídeo: "Tratamiento de arbustos de grosella con agua hirviendo"
Este vídeo te mostrará cómo tratar correctamente los arbustos con agua hirviendo.



