Procesamiento de grosellas después de la cosecha en otoño
Contenido
¿Por qué es necesario el tratamiento de otoño?
El tratamiento otoñal de los arbustos de grosella después de la cosecha consiste en podar las ramas secas y enfermas y aplicar fertilizantes minerales u orgánicos. La poda ayudará a proteger la planta de plagas y enfermedades durante el otoño. Se deben eliminar los brotes de cinco años y las partes más delgadas y débiles. También se deben podar las partes afectadas o susceptibles a ataques de plagas.
Para prevenir las enfermedades de las grosellas, se recomienda rociar las bayas y el suelo con una solución de azufre coloidal o malatión. Recuerde que tratar las grosellas en otoño es fundamental para un cultivo exitoso.
Reglas de procesamiento
Tras la cosecha, los arbustos de grosella deben ser tratados según ciertas normas;
- En primer lugar, además de eliminar las ramas viejas y débiles, hay que deshacerse de los brotes infestados de larvas de escarabajo. Estos brotes suelen estar marchitos y secos, con el centro negro. Si es posible, también conviene eliminar desde la base cualquier brote atacado por ácaros de las yemas, así como los brotes jóvenes y débiles cubiertos de oídio.
- En segundo lugar, si tiene un arbusto viejo en su jardín, vale la pena rejuvenecerlo. Sin embargo, no lo pode en exceso. Si piensa eliminar muchas ramas viejas, hágalo en varias etapas. Es decir, debería podar durante tres años, eliminando un tercio de las ramas anualmente. Trate los extremos cortados de las ramas gruesas con brea y queme las ramas eliminadas.
- En tercer lugar, una vez finalizada la poda, es necesario realizar una pulverización preventiva otoñal de los arbustos con una solución de malatión o azufre coloidal.
- En cuarto lugar, la elección del fertilizante para el tratamiento de arbustos de bayas depende del resultado deseado. Por lo tanto, si se desea fertilizar las plantas y el suelo circundante, se deben aplicar minerales o materia orgánica. Si se desea combatir enfermedades o eliminar plagas, se deben tratar los arbustos con agentes protectores, como malatión o caldo bordelés.
fertilizantes minerales
Si se siguen todas las normas para el cultivo de grosellas y se les proporciona el cuidado adecuado, la planta se vuelve resistente a enfermedades y plagas. La fertilización oportuna y apropiada también influye positivamente en la resistencia de la baya. La dosis y el momento de la fertilización varían según cada planta. Entonces, ¿qué nutrientes se deben elegir para nutrir las plantas y así aumentar la resistencia de la grosella a enfermedades y plagas?
Si se añadió suficiente fertilizante al hoyo al plantar la grosella, no será necesario fertilizarla durante los próximos dos años. Dos años después de la cosecha, se debe añadir al suelo una mezcla de potasio y fósforo. Para ello, agregue una cucharada de gránulos de potasio sin cloruro y superfosfato doble debajo de cada planta.
Después, riegue cada planta con un cubo de agua. Si va a fertilizar durante la época de lluvias, simplemente vierta los nutrientes en la tierra. Distribuya el fertilizante alrededor del perímetro.
La fertilización adicional en otoño puede consistir en estiércol con alto contenido de potasio (un cubo por cada arbusto), una solución de superfosfato y fosfato de potasio, o nitrofosca.
fertilizantes orgánicos
También puedes fertilizar las bayas y la tierra alrededor del arbusto con materia orgánica. En otoño, las grosellas necesitan fertilizarse durante dos o tres meses. Los nutrientes añadidos necesitan tiempo para que la planta los absorba. La materia orgánica (por ejemplo, estiércol o excremento de gallina) se descompone en seis meses.
En consecuencia, las sustancias comenzarán a hacer efecto en marzo. Por lo tanto, la masa verde comenzará a crecer aproximadamente a los tres meses. Este tratamiento debe realizarse durante todo el año, con fertilización regular para asegurar que el arbusto reciba un aporte constante de nutrientes.
Podar los arbustos como parte del tratamiento
Antes de aplicar preparados especiales a los arbustos de grosella, conviene podarlos. Durante los tres primeros años tras su plantación, se recomienda realizar un aclareo por motivos sanitarios y preventivos. Esta poda consiste en eliminar las ramas enfermas, delgadas y rastreras. Los arbustos más viejos se podan para rejuvenecerlos. Para ello, se eliminan las ramas viejas y débiles, dejando cuatro brotes de dos y tres años y siete de un año.
Al podar los arbustos de grosella, tenga en cuenta que las grosellas rojas y blancas se forman en las ramas más viejas, mientras que las grosellas negras lo hacen en las más jóvenes. La mejor forma para las grosellas rojas y blancas es la de copa. Esta consta de cinco tallos principales, podados a 0,2 metros del suelo. Los arbustos de grosella negra deben podarse según la variedad de la baya: extendidos o compactos. Sin embargo, evite la sobrepoblación. Las ramas más viejas deben eliminarse al ras del suelo, lo que favorece el crecimiento de nuevos brotes.
Las ramas viejas (de tres años o más) de los arbustos de grosella negra deben eliminarse inmediatamente después de la cosecha. La poda posterior de otras variedades de bayas debe realizarse durante el período de dormancia, cuando el follaje se haya caído por completo. Este período suele darse a finales de otoño.
Por lo tanto, tratar las grosellas en otoño, después de la cosecha, tiene múltiples beneficios. Ayuda a proteger las plantas de plagas y enfermedades, a rejuvenecer los arbustos viejos y a preparar la cosecha para el invierno. De esta manera, se puede obtener una abundante cosecha de bayas en primavera.
Vídeo: "Cuidado de la grosella de otoño"
En este vídeo, un experto compartirá secretos sobre cómo cuidar adecuadamente las grosellas en otoño.





