Cómo plantar rábanos correctamente y obtener una excelente cosecha
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Selección y preparación del suelo
Los rábanos deben plantarse en un lugar abierto y soleado con suelo suelto, neutro o ligeramente ácido. La preparación del suelo comienza en otoño: se limpia la zona de restos vegetales, se cava la tierra a la profundidad de una pala, se añade fertilizante orgánico y, si es necesario, cal o harina de dolomita (si el suelo es demasiado ácido). En primavera, solo queda esparcir fertilizante mineral y cavar a una profundidad de 20 cm. Esto debe hacerse tan pronto como el suelo se descongele. Se puede cubrir el bancal con film transparente; así, la tierra se descongelará y calentará antes.
No se pueden plantar rábanos después de verduras crucíferas, pero las judías, las patatas, los tomates y los pepinos son buenos cultivos predecesores.Dado que la primera hortaliza de primavera se cosecha temprano, se suelen plantar plantones de tomate en su lugar. Algunos jardineros también siembran rábanos cerca de patatas, cebollas, ajos, remolachas y repollo; esta compatibilidad resulta beneficiosa. Se ha observado que las hortalizas de raíz, especialmente sabrosas, maduran mejor cerca de las judías, y que, al plantarlas cerca de la lechuga, no sufren el ataque de pulgones.
Preparación de semillas
Las semillas frescas suelen tener una tasa de germinación de al menos el 90%, pero esta disminuye con un almacenamiento prolongado. Primero, deseche las semillas defectuosas. Para ello, simplemente viértalas en un vaso y llénelo con agua limpia. Las que no se hundan después de unos minutos pueden desecharse junto con el agua.
A continuación, desinfecta las semillas sumergiéndolas en una solución de permanganato de potasio durante 20 minutos y luego enjuagándolas con agua corriente. Algunos jardineros optan por secarlas ligeramente para facilitar la siembra. Otros las sumergen en una solución estimulante del crecimiento.
Este tratamiento acelera significativamente la germinación. Sin embargo, lo más común es remojar las semillas en agua durante 24 horas para favorecer la germinación: se colocan sobre una gasa húmeda, se cubren con otra capa de gasa y se dejan en un lugar cálido. Al día siguiente, se espolvorean con tiza o almidón para facilitar la siembra, y así comienza la temporada de siembra.
Métodos de siembra
Los rábanos se siembran a principios de primavera, en cuanto se descongela la tierra. En la mayoría de las regiones, esto ocurre entre la segunda quincena de marzo y mediados de abril. En las zonas donde la nieve no se derrite hasta mayo, se utilizan plantones.
Las variedades europeas de rábano anual se siembran en primavera, mientras que las variedades bienales (variedades asiáticas) se pueden sembrar en otoño, cuando ya han llegado las primeras heladas. No se congelarán durante el invierno, experimentarán estratificación natural, germinarán y, una vez que la nieve se derrita, darán una cosecha dos semanas antes.
Semillas en tierra abierta
En el bancal se hacen surcos de 2 cm de profundidad, dejando 5 cm entre ellos y al menos 15 cm entre cada par de surcos. Esta separación evita que las plantas recién crecidas se den sombra entre sí. Con el mismo fin, las semillas se colocan individualmente en los surcos, separadas 5 cm entre sí, de forma escalonada; este es el método de siembra más común. Las variedades con raíces más grandes se siembran con menos frecuencia.
Se riegan los surcos. Luego, se colocan las semillas germinadas a mano o con una herramienta especial. Algunos pegan el material de siembra a tiras de papel con cola, las extienden sobre la tierra y las cubren. Los surcos llenos se presionan ligeramente con un rodillo o el dorso de una azada. Es recomendable cubrir las plántulas con turba o serrín, regarlas y cubrirlas con film transparente o, mejor aún, con tela no tejida. Se retira el film transparente cuando brotan las plántulas, pero la tela no tejida puede dejarse puesta hasta que suban las temperaturas: el agua, el aire e incluso la luz solar la penetran, permitiendo que las plantas emerjan y crezcan al levantarla.
Cultivo de plántulas y siembra
Puedes preparar plantones de rábano en casa: siembra los rábanos en bandejas de 10 cm de altura, proporcionándoles humedad constante, luz brillante durante 12 horas y una temperatura ambiente de 20 °C durante el día y 10 °C por la noche. Como ves, este tipo de cuidado del rábano es sencillo. Si se retrasa la siembra, conviene bajar la temperatura para evitar que los plantones se espiguen demasiado.
El aclareo de cultivos puede dañar fácilmente las raíces delicadas. Los horticultores hacen bien en simplemente pellizcar las plantas débiles a ras del suelo en lugar de arrancarlas. Las plantas se pueden trasplantar al jardín cuando el clima lo permita, independientemente del número de hojas. Sin embargo, no se recomienda el repujado, ya que incluso el más mínimo daño a las raíces hará que la planta produzca un tallo floral.
Consejos y cuidados adicionales
Cultivar rábanos no requiere mucho tiempo en comparación con otras hortalizas. Prosperan en ambientes húmedos, cálidos y luminosos. Toleran heladas ligeras, pero se desarrollan mejor en climas cálidos. Necesitan riego frecuente, pero sin encharcarlos. A veces, durante periodos de lluvias intensas, incluso se cubre el semillero con plástico.
El riego irregular perjudica el cultivo de raíz: el riego insuficiente lo endurece, mientras que el riego excesivo provoca grietas.
Además, el exceso de humedad puede provocar la pudrición. Afloje con cuidado el espacio entre las hileras para evitar que la hierba crezca demasiado; como las hortalizas maduran rápidamente, las malas hierbas no tendrán tiempo de sofocarlas. No es necesario fertilizar si el terreno está bien preparado. Si decide usar fertilizante, aplíquelo con moderación: demasiado nitrógeno dará como resultado un follaje exuberante y raíces débiles, mientras que demasiado potasio producirá nabos deformes.
La pulverización con soluciones de ceniza, tabaco, cáscaras de cebolla y ajo con jabón ofrece una excelente protección contra las plagas. Puede cultivar sus propias semillas durante el verano trasplantando 2 o 3 plantas. El clima determinará cuántas cosechas puede obtener por temporada: puede sembrar de nuevo cuando la temperatura no supere los 26 °C, siempre que reciban 12 horas de sombra al día.
Vídeo: Plantación de rábanos
Este vídeo te mostrará cómo plantar rábanos correctamente.





