Cultivo de bulbos de cebolla en Siberia: variedades y características de cultivo
Contenido
Variedades de cebolla
Hoy en día, existen varias variedades que son particularmente productivas cuando se cultivan en Siberia. Estas incluyen:
- La cebolla anual siberiana es una variedad de maduración temprana, de sabor moderadamente picante y con una excelente vida útil. Su raíz es redonda, ligeramente aplanada en los extremos. Los bulbos suelen ser amarillos y pesan en promedio 0,15 kilogramos. Esta hortaliza se cultiva a partir de bulbos. Generalmente se cultiva como anual.

- Strigunovsky. Esta variedad se caracteriza por su rápida maduración, sabor intenso y buena conservación. El fruto es redondo y se estrecha hacia el cuello. Cada fruto pesa entre 0,1 y 0,15 kilogramos.
- La cebolla Yukont es de maduración temprana y larga vida útil. Tiene un sabor picante y un singular color púrpura. Cada cebolla pesa 0,12 kilogramos. Se pueden cosechar hasta 4 kilogramos por unidad de superficie.
- Ermak es una variedad que se cultiva generalmente como anual. Se puede almacenar durante largos periodos sin perder sus propiedades esenciales. Sus frutos son de sabor intenso y color dorado. Los frutos que crecen a partir de racimos pueden llegar a pesar hasta 0,2 kilogramos. Se puede obtener un rendimiento de 4 kilogramos por unidad de superficie.
Vídeo "Variedades de cebolla"
Este vídeo te informará sobre las variedades comunes de bulbos de cebolla.
¿Cuándo sembrar?
La siembra de cebollas en Siberia sigue un calendario específico, determinado por el clima de la región. Puede realizarse tanto en primavera como en otoño. Muchas variedades de esta hortaliza no sobreviven al duro invierno. Las cebollas más pequeñas son las más afectadas: comienzan a pudrirse o a brotar alrededor de Año Nuevo. Por lo tanto, se recomienda sembrarlas a mediados de otoño. En estas condiciones, la semilla tendrá tiempo de desarrollar hasta cuatro brotes. Posteriormente, llegará el frío, lo que afectará negativamente la temporada de crecimiento. Sin embargo, estas cebollas producirán buenos brotes en primavera.
En Siberia, los jardineros suelen plantar cebollas en primavera. Se recomienda hacerlo a principios de mayo, o antes de que finalicen los primeros diez días del mes. Para entonces, la tierra se habrá calentado hasta una profundidad de 0,15 metros y alcanzará una temperatura de hasta 8 °C. Si se siembra antes, la hortaliza solo echará hojas y los nabos no crecerán. Esta cosecha debe consumirse de inmediato; no es apta para almacenarse durante el invierno. Si se siembra tarde, los frutos también serán pequeños, ya que no tendrán suficientes días cálidos para desarrollarse.
El cultivo de cebollas perennes es muy popular en Siberia. Este tipo de cultivo debe sembrarse en otoño. La planta prospera durante el invierno y produce abundantes hojas verdes en primavera. Se pueden cultivar varias cebollas en un solo hoyo. Crecen fuertes pero compactas. Pueden crecer en el mismo lugar durante 3 o 4 años. Transcurrido este tiempo, se deben separar las cebollas y plantarlas en una zona diferente.
Preparativos para la siembra
Cultivar cualquier planta no es fácil. Antes de sembrar, la semilla debe prepararse adecuadamente. Dado que las hortalizas germinan mal en Siberia y suelen ser susceptibles a enfermedades, su preparación requiere especial atención.
En otoño, los bulbos deben secarse completamente para su siembra. Colóquelos en bolsas de tela o frascos de vidrio. Selle estos recipientes con tela, no con tapas de nailon. Almacene las semillas entre 0 °C y 2 °C (32 °F y 36 °F); de lo contrario, las cebollas desarrollarán numerosos tallos, pero permanecerán pequeñas.
Existen diferentes maneras de preparar el material de siembra:
- Disuelve un par de cucharadas de sal en medio cubo de agua. Remoja los bulbos en esta solución durante un día, luego colócalos en una solución de permanganato de potasio durante quince minutos más. Después, extrae las semillas y, sin limpiarlas, plántalas en la tierra.
- Remoja las cebollas en agua tibia durante 10 horas. Añade más agua tibia a medida que se enfríe. Después del remojo, sumérgelas durante 10 minutos en una solución de permanganato de potasio o sulfato de cobre. Antes de sembrar, puedes tratar las semillas con un estimulante del crecimiento.
- Para evitar el calentamiento prolongado de la hortaliza, las semillas pueden sumergirse en agua a 55 °C durante 15 minutos, seguidos de un baño de agua fría de 15 minutos. Tras estos pasos, los bulbos deben tratarse con permanganato de potasio antes de plantarlos.
Preparación del suelo
Las cebollas prosperan con luz. Por lo tanto, al elegir un lugar para plantarlas, es mejor optar por una zona bien iluminada y ventilada. La preparación del suelo debe comenzar en otoño. Esto implica cavar la tierra y fertilizarla con compost. Cabe destacar que fertilizar con materia orgánica, estiércol o excremento de aves antes de plantar estimulará el crecimiento de la parte aérea de la planta a expensas de la parte subterránea. Con la llegada de la primavera, se deben añadir fertilizantes minerales como nitrato de amonio, superfosfato, sulfato de potasio (o ceniza de madera) a los bancales.
Los suelos ácidos no son aptos para el cultivo de cebollas. Por lo tanto, lo mejor es alcalinizar dichos suelos utilizando cal o ceniza de madera.
Cuidado
En la etapa inicial del cultivo de cebollas, el cuidado de las plantas consiste en un riego regular. Posteriormente, se añade la fertilización. La primera fertilización se realiza cuando las plántulas tienen de 3 a 4 hojas. Para ello, se suelen utilizar urea, superfosfato, sal de potasio o ceniza de madera. Estas sustancias deben diluirse en un cubo de agua y la solución resultante debe aplicarse sobre las plantas.
Para la primera fertilización, es aceptable utilizar fertilizantes combinados ya preparados. Por ejemplo, diluya 25 gramos de nitrofosfa en un cubo de agua.
Las cebollas se fertilizan por segunda vez un mes después de la primera aplicación de nutrientes. Para ello, disuelva superfosfato doble y sal de potasio en un cubo de agua tibia.
Si su objetivo es obtener cebollas grandes, debe evitar usar productos orgánicos.
Inmediatamente después de la siembra, riegue la hortaliza no más de un par de veces por semana. Después, con una vez por semana será suficiente. Si el verano es seco, riegue con mayor frecuencia. Deje de regar un mes antes de la cosecha.
La cosecha debe realizarse en tiempo seco. Tras la cosecha, las hortalizas deben secarse al sol o en el desván. Todas las hortalizas cultivadas a partir de semillas deben almacenarse en un lugar fresco.
Enfermedades
Con una preparación adecuada del material de siembra, el riesgo de enfermedades es mínimo. Si aparecen síntomas, se recomienda rociar los bancales con caldo bordelés cada dos semanas. Los frutos tratados se pueden consumir solo después de una semana.
Cosecha
Las cebollas deben cosecharse cuando los brotes verdes nuevos hayan dejado de formarse y las hojas viejas se hayan secado y estén esparcidas por el suelo. Esto debe hacerse en un día seco. Después, la cosecha se seca al sol y luego se deja secar en el ático durante dos semanas más. La cebolla se puede almacenar con el tallo delgado y seco.
Así pues, hoy en día es posible cultivar con éxito bulbos de cebolla incluso en Siberia. La preparación adecuada del material de siembra es fundamental.
Vídeo: "Las sutilezas de plantar bulbos de cebolla"
Este vídeo te mostrará cómo plantar correctamente los bulbos de cebolla.




