¿Qué hacer si las hojas de la patata se ponen amarillas?
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Causas y métodos de control
Cultivar patatas es un reto que requiere no solo un cuidado meticuloso, sino también un control eficaz de plagas. Las hojas amarillas son una clara señal de que las plantas están sufriendo. Normalmente, las hojas inferiores se ponen amarillas. Si esto ocurre, es fundamental identificar y solucionar la causa de inmediato. De lo contrario, podría perder gran parte de la cosecha.
Lo más frecuente es que las plantas de patata empiecen a ponerse amarillas por las siguientes razones:
- Cuidado inadecuado de las plantas. Esto podría incluir una gestión inadecuada del agua o la aplicación incorrecta de las prácticas agrícolas necesarias para el cultivo de esta planta;
- Estado del suelo. Puede estar agotado o sobrefertilizado. Ambas situaciones afectarán negativamente la salud de las plantas;
- el inicio del período de maduración activa de los cultivos de raíz.
Por lo tanto, si las hojas pequeñas de tu planta de papa comienzan a amarillear, es momento de ajustar sus cuidados. Además, una planta amarillenta podría estar infectada con microorganismos patógenos. Las plagas de insectos también pueden atacar los cultivos. La causa de las enfermedades y plagas es un cuidado inadecuado de las plantas. Por ejemplo, una deficiencia de manganeso o hierro, que se produce por el agotamiento del suelo y una fertilización incorrecta, puede provocar clorosis.
Analicemos con más detalle las situaciones en las que las patatas sufren enfermedades virales y fúngicas, así como plagas. Al fin y al cabo, el plan de acción en cada caso concreto depende de la causa subyacente.
Vídeo "Enfermedades"
Este vídeo te explicará qué enfermedades pueden dañar tu cultivo de patatas y cómo combatirlas.
Enfermedades virales
Las enfermedades virales son las más peligrosas para los cultivos de papa, ya que son incurables. Los principales síntomas de daño a las plantas causado por patógenos virales incluyen:
- amarilleamiento de las hojas;
- torsión de la lámina de la hoja;
- marchitez.
Sin embargo, es importante recordar que la gravedad de los síntomas mencionados puede variar. Todo depende de las condiciones de cultivo, la variedad de patata y el tipo de patógeno.
Las plantas de patata se infectan cuando plantas sanas entran en contacto con insectos. En este caso, las plantas pueden ser víctimas tanto de microorganismos patógenos como de plagas.
Dado que las plantas infectadas no tienen cura, el tratamiento más eficaz consiste en arrancarlas de raíz lo antes posible. Esto debe hacerse de forma que el follaje infectado no entre en contacto con plantas sanas.
Para prevenir la aparición de enfermedades virales es necesario:
- Utilice únicamente material de semillas sano para la siembra;
- Realizar tratamientos preventivos a las plantas periódicamente. Los tratamientos deben realizarse a intervalos específicos, dependiendo del producto utilizado;
- Realizar inspecciones diarias de los lechos para identificar posibles vectores de plagas.

Siguiendo estas recomendaciones, podrá proteger sus patatas de las enfermedades virales. Sin embargo, si no se siguen los cuidados adecuados de las plantas y las recomendaciones anteriores, sus cultivos podrían ser susceptibles a las dos enfermedades virales más peligrosas que se describen a continuación:
- Virus del rizado de la hoja;
- Virus del mosaico de la alfalfa.
Analicemos ambas enfermedades con más detalle.
Virus del enrollamiento de la hoja. Esta enfermedad afecta significativamente la formación de tubérculos, específicamente la cantidad y calidad del fruto. Cuando las plantas de papa se infectan con este virus, la enfermedad puede desarrollarse de forma primaria o secundaria. Durante la infección primaria, los bordes de la lámina superior de la hoja comienzan a enrojecer. Posteriormente, las hojas se enrollan y se vuelven muy rígidas. Si la enfermedad progresa a una forma secundaria, los mismos síntomas aparecen en las hojas inferiores.
Las patatas afectadas por esta enfermedad tampoco pueden formar tubérculos sanos. En este caso, se infectan con necrosis reticular.
Virus del mosaico de la alfalfa. Esta enfermedad es menos grave que el virus que causa el enrollamiento de las hojas. Sin embargo, también perjudica los cultivos. Un arbusto infectado con este virus puede volverse amarillo. Esto ocurre porque disminuye el contenido de clorofila en las hojas, lo que interrumpe la fotosíntesis y provoca un desarrollo deficiente del cultivo.
Cabe destacar que el virus del mosaico de la alfalfa puede persistir en los tubérculos durante mucho tiempo. Por lo tanto, se debe revisar minuciosamente la cosecha para detectar cualquier infección. Esto minimizará el riesgo de que aparezcan plantas enfermas el próximo año.
Parásitos
Las principales fuentes de microflora patógena, ya sean hongos o virus, son los parásitos o las plagas de insectos. Este cultivo hortícola suele sufrir infestaciones del escarabajo de la patata y de nematodos. Si bien el escarabajo es relativamente conocido, los nematodos representan un verdadero misterio para los horticultores. Tres especies pueden parasitar las patatas:
- Hongo del tallo. Penetra los tubérculos desde el lado del brote. Como resultado, las raíces comienzan a agrietarse y pudrirse. Dichos frutos no son comestibles;
- Papa dorada. Esta es la plaga más peligrosa. Su presencia reduce la producción a la mitad, aproximadamente. Esto se debe a que el parásito ataca el sistema radicular de las plantas de papa. Por lo tanto, el amarilleo y marchitamiento de las hojas es solo un síntoma, que aparece únicamente en casos de infestación severa. La plaga se puede identificar desenterrando la planta y examinando su sistema radicular en detalle.

- Nematodo agallador. Esta plaga infesta raíces, tubérculos y la parte subterránea de los brotes. Las plantas afectadas detienen su crecimiento y pronto comienzan a marchitarse. Una característica distintiva del nematodo agallador es la formación de engrosamientos en las zonas afectadas de la planta. Con el tiempo, estos engrosamientos aumentan de tamaño y finalmente se fusionan entre sí. Tras un tiempo, debido a la penetración de microorganismos en el tubérculo, el fruto comienza a pudrirse.
Para prevenir la infestación de las plantas de papa por esta plaga, los expertos recomiendan plantar variedades resistentes. Sin embargo, es importante recordar alternar las variedades resistentes con las no resistentes cada tres o cuatro años. Esto evitará que la plaga se adapte a las variedades de papa que se cultivan.
Otro método para controlar los nematodos es sembrar maíz o frijoles en la zona.
En julio, es posible que observe manchas negras en las hojas amarillentas de las plantas de papa. Esto indica que la planta ha sido atacada por nematodos.
Se puede prevenir la aparición de nematodos en los cultivos de patatas de las siguientes maneras:
- Se recomienda plantar festuca de prado, centeno, remolacha azucarera y de mesa, caléndulas, altramuces, avena y guisantes cerca de las patatas;
- Antes de sembrar, aplique urea como fertilizante preventivo al suelo. Aplique un kilogramo de urea por cada 100 metros cuadrados. Como alternativa, triture un kilogramo de brotes de papa en una picadora de carne y añada 10 litros de agua. La solución resultante alcanza para regar aproximadamente 100 metros cuadrados.
- Al plantar patatas, añade dos o tres puñados de estiércol bien descompuesto a cada hoyo. Puedes sustituirlo por compost, una cucharada de excrementos secos de pájaro o un puñado de ceniza. Tras añadir estos abonos, cúbrelos con una fina capa de tierra.
- Una vez que las plántulas estén completamente trasplantadas, se recomienda regar los semilleros con estiércol líquido de pollo. Para obtener la solución necesaria, utilice una proporción de 1:10 de fertilizante a agua. Para tratar un metro cuadrado de superficie cultivada, aplique 10 litros de la solución resultante.
Siguiendo estas recomendaciones, podrá minimizar el riesgo de que aparezcan nematodos en los cultivos de patatas.
Enfermedades fúngicas
Las enfermedades virales no son las únicas que pueden causar el amarilleamiento de las hojas de la papa. Estos síntomas también son típicos de las enfermedades fúngicas. La enfermedad fúngica más común de la papa es el tizón tardío.
La principal fuente de este tipo de enfermedad fúngica es el material de siembra infectado. Además, los patógenos pueden estar presentes en el propio suelo, lo que provoca la infección de los arbustos a medida que crecen. Si no se trata, se puede perder más de la mitad de la cosecha.
Como medida preventiva, se recomienda rociar las plantas de papa con fungicidas para evitar el desarrollo del tizón tardío. Este procedimiento se recomienda durante la etapa de brotación. También se pueden rociar las hojas con una solución de permanganato de potasio con ajo. La solución se prepara remojando pulpa de ajo en un balde con agua durante 24 horas. Transcurridas las 24 horas, se cuela la solución y se añaden 1,5 gramos de permanganato de potasio. Se rocía la solución preparada sobre las plantas por la tarde/noche. El primer tratamiento contra el tizón tardío se realiza dos semanas después de la siembra, y el segundo, 10 días después.
Además del tizón tardío, el amarilleamiento de las hojas de la papa también puede deberse a enfermedades como la marchitez por Verticillium o la marchitez por Fusarium. El patógeno se vuelve especialmente activo a temperaturas entre 17 y 22 grados Celsius.
Esta enfermedad es bastante común y puede provocar una reducción significativa en la cosecha. Los primeros síntomas de la infección suelen aparecer en junio. Las hojas de los arbustos comienzan a amarillear desde la base. Con el tiempo, esta coloración anormal se extiende por toda la planta. Las hojas primero se ponen amarillas, luego se enrollan y mueren.
El desarrollo de esta enfermedad suele coincidir con riego insuficiente y sequía. Sin embargo, las lluvias torrenciales frecuentes también pueden desencadenar la marchitez por Fusarium. En este caso, los primeros síntomas pueden aparecer incluso en plántulas jóvenes. Si esto ocurre, existe una alta probabilidad de utilizar material de siembra infectado.
Para evitar este tipo de marchitamiento en las patatas, debe seguir las siguientes recomendaciones:
- La rotación de cultivos es esencial. Las patatas solo pueden plantarse en la misma zona después de cuatro años;
- Para la siembra, solo se debe seleccionar material vegetal sano y de alta calidad. Lo mejor es comprar patatas a productores de confianza;
- Deshierbe oportuno de los canteros y eliminación de malezas;
- Todas las plantas infectadas deben ser retiradas inmediatamente de los bancales y luego quemadas;
- Periódicamente, es necesario rociar las plantaciones con una solución de sulfato de cobre (se toman 10 g de la sustancia por cada 10 litros de agua).
Si se detectan hojas amarillas en las plantas de patata, es importante determinar la causa antes de tomar medidas preventivas para salvar la cosecha. Sin medidas de control específicas, el riesgo de perder la mayor parte de la cosecha es muy alto.
Ahora ya sabes por qué las hojas de la patata se ponen amarillas y qué hacer en esta situación.
Vídeo: Cómo combatir el amarilleamiento
Este vídeo te mostrará cómo combatir el desagradable fenómeno de las hojas de patata que se ponen amarillas.



