Secretos para cultivar trufas en casa

Las trufas son un manjar exquisito, admirado por gourmets de todo el mundo. Su sabor único y la dificultad de su cultivo las convierten en un producto raro y valioso, cuyo cultivo promete una rentabilidad considerable. Si está pensando en emprender un nuevo negocio, le sugerimos que considere el cultivo de trufas en casa.

Elegir un lugar de aterrizaje

Las trufas crecen de forma natural en las regiones meridionales de Europa, donde el clima no es ni demasiado cálido ni demasiado húmedo. Debido a que estos hongos son extremadamente exigentes con el medio ambiente, solo los habitantes de las regiones meridionales pueden permitirse cultivar trufas al aire libre en Rusia o Ucrania.

Las trufas son setas caras y raras.

Los siguientes son buenos lugares para plantar trufas:

  • Terreno abierto. Como se mencionó anteriormente, esta opción solo es adecuada para regiones con un clima cálido constante, ya que las olas de frío representan un alto riesgo de pérdida de cosechas. Un cinturón forestal con árboles de hoja caduca como robles, nogales y hayas es preferible para el cultivo;
  • Invernadero. Un invernadero para setas puede proporcionar una microflora y macroflora ideal durante todo el año. Sin embargo, su instalación requiere una inversión financiera considerable, que solo se justifica si se planea cultivar trufas comercialmente. De lo contrario, los costes de calefacción, ventilación, humidificación y sustrato de alta calidad no compensarán la inversión.
  • En un sótano. La opción más frecuente en las búsquedas de "cómo cultivar trufas en casa". Un sótano es ventajoso porque no requiere una construcción costosa y no se ve afectado por desastres naturales como el viento, el granizo y la nieve. Sin embargo, equiparlo también resultará caro. Además, un sótano requerirá desinfección y tratamiento adicionales con agentes antibacterianos.

El lugar de plantación, independientemente de su ubicación geográfica, debe contener un suelo cuyo equilibrio hídrico se encuentre en el límite entre neutro y alcalino. Además, el suelo debe ser rico en aire, humus y calcio. Debe estar libre de piedras y superficies irregulares de gran tamaño. Debe tratarse contra plagas y enfermedades.

Los hongos se pueden plantar en tierra abierta.

Al igual que otras especies más simples —como las setas ostra y los champiñones—, las trufas no toleran los vientos fuertes, el sol intenso ni el frío. La temperatura óptima para su cultivo es de 20 a 22 grados Celsius. Se debe mantener alejados a los animales, así como a otras flores, árboles y arbustos.

Características de aterrizaje

Los recolectores de setas modernos cultivan tres variedades principales de setas gourmet: blancas, negras y chinas. Todas ellas se pueden encontrar en estado silvestre, y también se puede intentar cultivar material vegetal a partir del micelio.

Las trufas crecen en robles y hayas. Se pueden cultivar sobre serrín o directamente sobre sus raíces. El primer método es más sencillo para el cultivo doméstico.

Los árboles triturados se inoculan con micelio y se colocan en un lugar estéril y cálido hasta que se forme la micorriza, una fusión de esporas de hongos con el árbol. Una vez que la micorriza enraíza, se puede utilizar para la siembra. Sin embargo, esto no ocurrirá hasta dentro de al menos un año.

Una opción más sencilla es comprar material de siembra ya preparado de un proveedor de confianza. Este material suele venderse ya en un sustrato, que se planta en pequeños puñados. Para ello, cava hoyos de 25 a 75 cm de profundidad, separados por 2 metros cuadrados. Antes de plantar, riega el hoyo, añade una capa de compost y cubre el micelio con una capa de heno o serrín (de hasta 200 mm de espesor).

Es mejor plantar en campo abierto a finales de la primavera.

Lo mejor es plantar los futuros hongos al aire libre a finales de primavera o principios de verano, cuando no hay riesgo de heladas. El micelio se puede plantar en sótanos e invernaderos en cualquier época del año.

Reglas de cuidado y cultivo

Para las trufas cultivadas en interiores, son beneficiosos los fertilizantes que contienen cobre, boro, zinc, calcio y hierro. Los fertilizantes con nitrógeno, fosfato y potasio también son útiles. En zonas boscosas, es mejor aplicar el fertilizante no directamente en el lugar de plantación de las setas, sino en el suelo cercano al árbol donde crecen las trufas.

Este cultivo no tolera malezas, hojas secas ni caídas, ni otras plantas que no sean beneficiosas. Los álamos, abetos y castaños son especialmente dañinos. Tampoco tolera la interacción con animales, en particular con cerdos, conocidos por buscar trufas.

En invierno, las plantas a cielo abierto se cubren con mantillo para proteger la zona de plantación de las heladas en la medida de lo posible. En primavera, conviene tratar el suelo contra plagas e insectos.

La cosecha tarda aproximadamente 5 años en formarse.

Cosecha

El fruto tarda unos cinco años en desarrollarse, tiempo durante el cual la fruta, con una cáscara densa, redonda y texturizada, se desarrolla bajo tierra a una profundidad de 20 a 45 cm. Es la parte de la fruta la que se consume.

Durante la cosecha, las setas se desentierran con cuidado. Cualquier daño al fruto afecta negativamente no solo a su aspecto (puede pudrirse), sino también a su sabor. Para evitar pérdidas durante la cosecha, desentierre las trufas con cuidado y guárdelas sobre una superficie plana cubierta con una capa de paja suave.

El peso promedio de un hongo maduro es de 500 a 1200 g, y el peso total de la cosecha puede superar los 9 kg.

¿Es posible montar un negocio con las trufas?

Los ingresos procedentes de las trufas pueden alcanzar casi el 300% del importe de la inversión.

Dado que el cultivo de trufas en casa requiere mucha energía, los agricultores desean recuperar la inversión lo antes posible. Sin embargo, el largo periodo de maduración del cultivo y ciertas dificultades asociadas a su producción dificultan la obtención de beneficios rápidos.

Sin embargo, la rentabilidad puede alcanzar casi el 300 % de la inversión. Las trufas han gozado de una demanda constante en el mercado ruso durante los últimos 20 años. Actualmente, el precio medio de 1 kg de este hongo es de 56 000 rublos. El precio medio de un plato de trufa en un restaurante de Moscú oscila entre los 500 y los 1000 rublos.

Además de a los restaurantes, puedes ofrecer tus productos a fabricantes de condimentos. El intenso aroma de esta seta también está presente en el aceite de trufa, para el cual los productores compran los frutos al por mayor.

Dadas las tendencias de desarrollo de la gastronomía moderna en los restaurantes, el cultivo de trufas tiene el potencial de convertirse no solo en un negocio rentable, sino también en un negocio de moda.

Vídeo: Cómo cultivar trufas

Este vídeo te mostrará cómo cultivar tus propias trufas.

Pera

Uva

Frambuesa