Cómo plantar y cultivar melones correctamente en un invernadero

El melón es una fruta maravillosa que deleita a sus dueños con su pulpa jugosa y dulce cada verano. Esta planta prospera en climas cálidos, pero con las técnicas agrícolas adecuadas, incluso es posible cultivar melones en los Urales o Irkutsk, regiones con fluctuaciones extremas de temperatura. En este artículo, explicaremos cómo cultivar melones en invernadero y qué cuidados requieren.

Preparación del suelo y las semillas

Cultivar melones en un invernadero de policarbonato no es particularmente difícil ni requiere habilidades agrícolas especiales, pero hay algunos aspectos clave a tener en cuenta. Uno de ellos es la preparación adecuada del suelo y la selección de buenas semillas.

Cultivar melones en un invernadero no es demasiado difícil.

Comencemos con la tierra en la que plantaremos los melones. El suelo utilizado para la siembra debe ser fertilizado adecuadamente con antelación utilizando materia orgánica. Normalmente se recomienda usar estiércol o superfosfato. Como alternativa, se puede usar turba baja mezclada con arena en una proporción de 3:1.

¿Cómo elegir semillas de melón? Lo mejor es comprarlas a productores de confianza. También conviene elegir variedades aptas para el cultivo en invernadero, que producen frutos pequeños; estas son ideales. Otro factor importante es su frescura: cuanto más frescas, mejor. Además, elegir variedades que se adapten bien a las condiciones locales aumenta significativamente las probabilidades de éxito. Justo antes de plantar, remoje las semillas en una solución de permanganato de potasio durante media hora. Si se cumplen estas condiciones, los melones crecerán con éxito.

Cultivo y trasplante de plántulas

Para que sus melones de invernadero crezcan sanos y fuertes, necesitan cuidados adecuados. Se pueden aplicar fertilizantes poco después de sembrar las semillas. Generalmente, el momento óptimo para fertilizar es cuando la plántula desarrolla dos hojas. Los fertilizantes minerales se añaden para favorecer un crecimiento saludable.

Plántulas de melón antes de plantarlas en un invernadero

Asegúrese también de que las macetas estén suficientemente separadas para que los melones crezcan sin tocarse. Se recomienda regar los melones solo con agua tibia para garantizar un crecimiento vigoroso.

Cuando aparezcan cinco hojas, es necesario despuntar los plantones de melón. La poda de hijuelos laterales se realiza para asegurar una buena cosecha. Primero, se dejan dos brotes laterales; luego, cuando se forman los ovarios, se eliminan todos menos dos o tres. Una vez que los ovarios han crecido lo suficiente (hasta alcanzar el tamaño de una ciruela), se selecciona uno solo, perfectamente redondo, y se coloca en una malla espaciosa. Los melones en invernadero necesitan poda de hijuelos laterales para garantizar una buena producción de fruta, por lo que este procedimiento debe completarse antes de plantar las plántulas en macetas.

Para plantar correctamente plántulas de melón en su invernadero de policarbonato, prepare los hoyos con anticipación. Deben ser pequeños (40x40 cm) y estar bien fertilizados: utilice compost y humus, cúbralos con tierra y añada una pequeña cantidad de solución de permanganato de potasio. Antes de plantar, riegue las plántulas y colóquelas con cuidado en los hoyos.

Para evitar dañar las raíces, la plántula se coloca en el hoyo sin separarla de la tierra en la que crecía previamente. Generalmente se colocan cuatro plántulas por hoyo. Aunque la siembra se realice en invernadero, se recomienda cubrir las plántulas con plástico hasta que se hayan adaptado. También puede consultar el diagrama de siembra para calcular la cantidad de frutos que puede obtener.

Los melones requieren mucho espacio.

Condiciones necesarias en un invernadero

Ya hemos visto cómo plantar correctamente un melón en un invernadero. Ahora toca hablar de las condiciones necesarias para el correcto crecimiento y desarrollo de este cultivo.

Es evidente que cultivar estas plantas en un invernadero es inútil, ya que requieren mucho espacio. Por lo tanto, la siembra y el cuidado de los melones solo deben realizarse en un invernadero de policarbonato. La altura del espacio es crucial y debe ser de aproximadamente dos metros, dado que los melones trepan por enrejados. Además, la mejor opción es destinar un invernadero aparte para el cultivo de este producto, lo que creará las condiciones óptimas: temperaturas altas y mínima humedad.

No debe entrar aire frío en el invernadero.

Al preparar la habitación, es importante asegurarse de que no entre aire frío, ya que esto podría provocar enfermedades en la fruta. También conviene tener a mano materiales para cubrirla en caso de un descenso repentino de la temperatura, para que el pequeño huerto no corra el riesgo de estropearse.

Cuidado de un melón

Ya hemos cubierto los aspectos más importantes del cultivo de esta planta, y ahora podemos pasar a sus cuidados. Cuidar un melón en un invernadero no es particularmente difícil. No requiere habilidades especiales de jardinería; solo se necesita un riego y fertilización adecuados, y asegurarse de que el fruto se desarrolle correctamente.

Dado que los melones suelen crecer en climas áridos, no requieren riego frecuente. Antes de que aparezcan las primeras flores, riegue solo cuando la tierra esté suficientemente seca (incluso puede esperar a que las hojas se hayan marchitado ligeramente). Para asegurar que los frutos tengan un sabor dulce y no sean demasiado acuosos, reduzca la cantidad de agua a 0,5 litros por planta al día. Este cuidado garantizará un excelente crecimiento y desarrollo.

El riego del melón se realiza cuando la tierra está suficientemente seca.

¿Cómo nutrir la planta para asegurar una cosecha abundante? Los brotes jóvenes se fertilizan con una mezcla que contiene nitrato de potasio, superfosfatos y cloruro de potasio. También se utilizan mezclas preparadas, disponibles en tiendas, para el cuidado del melón. Durante la floración, se deben eliminar los fertilizantes nitrogenados y aumentar la frecuencia de aplicación de fertilizantes de potasio y fósforo.

Cuatro días después de la siembra, es necesario controlar la correcta formación de los frutos.

Para ello, la planta se ata al enrejado formando un patrón de tablero de ajedrez: el cordel se ata alrededor de la primera hoja y se anuda. La planta forma dos guías, que luego se fijan al enrejado, eliminando las demás. Las guías laterales se podan después de que aparece la cuarta hoja, y la guía principal se poda en cuanto llega al alambre.

Prevención de enfermedades y plagas

Si no se cuidan adecuadamente, los melones pueden enfermar.

Si has decidido cultivar melones en un invernadero, necesitas saber cómo prevenir enfermedades y plagas para asegurar plantas sanas y una cosecha abundante. Las enfermedades más comunes incluyen:

  • Mancha oliva (manchas marrones que se convierten en úlceras);
  • oídio (capa blanca en hojas y frutos);
  • antracnosis (manchas amarillas en las hojas y úlceras en las vides y los frutos);
  • Los ácaros y los pulgones son plagas muy peligrosas que pueden destruir arbustos enteros.

Para evitarlo, es necesario proporcionar las condiciones y el cuidado adecuados: mantener el invernadero limpio, colocar una estera de serrín empapada en una solución de sal, formalina y lejía cerca de la entrada. También se puede tratar la tapicería con una solución de permanganato de potasio.

Vídeo: Cultivo de melones en un invernadero

Este vídeo te mostrará cómo cultivar melones en invernadero y en campo abierto.

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