Cómo cultivar ajo para obtener una buena cosecha por cada 100 metros cuadrados

Al cultivar ajo en el jardín, es fundamental no solo plantar y cuidar bien las plántulas, sino también preparar cuidadosamente el terreno para su cultivo. Se recomienda seleccionar variedades adecuadas al clima de la región, preparar las semillas para la siembra, fertilizar la tierra y planificar en consecuencia. Solo así se logrará una cosecha de ajo más que satisfactoria por cada 100 metros cuadrados.

Preparación del suelo

Para asegurar una buena cosecha, es fundamental preparar cuidadosamente el suelo. Los agricultores no siempre le dan la importancia que merece, pero es un factor clave para el cultivo del ajo. Influye en el rendimiento tanto como la variedad elegida.

El ajo debe plantarse en tierra preparada.

Debes preparar el terreno para la siembra aproximadamente seis semanas antes de plantar ajo. El lugar que elijas debe estar bien iluminado y con la humedad adecuada. A veces, los jardineros tienen problemas con el nivel freático demasiado cerca del suelo. Si bien esto es muy beneficioso para muchas plantas, puede ser fatal para el ajo.

Lo importante es que no se recomienda regar en exceso el sistema radicular de los cultivos agrícolas. Por lo tanto, si tiene problemas con el agua subterránea, prepárese para aprender los conceptos básicos de los bancales elevados y cómo plantar ajo de forma adecuada en esta situación.

¿Qué tipo de suelo es mejor para cultivar ajo? El suelo franco con pH neutro es la respuesta, por supuesto. En cuanto a la fertilidad y el pH del suelo, estas características se pueden ajustar hasta cierto punto.

Se puede fertilizar el suelo con mezclas especiales o humus común, pero también se puede desacidificar con cal apagada o harina de dolomita.

¿Qué otros factores debe considerar un jardinero antes de empezar a cultivar? La rotación de cultivos. Es mejor no plantar ajo de invierno o primavera después de patatas, nabos o zanahorias. En cuanto a las plantas vecinas, evite plantar guisantes y judías cerca del ajo. De lo contrario, los brotes de ajo no recibirán suficientes nutrientes. Pero los guisantes no son la única opción. Las cebollas, los pepinos, las zanahorias y los tomates tampoco son vecinos ideales para sus cultivos.

El ajo crece mejor en suelos francos con acidez neutra.

Antes de plantar ajo, también debes añadir fertilizante a la tierra. Aquí te explicamos cómo fertilizar correctamente la tierra:

  • El humus, el superfosfato y la sal de potasio deben mezclarse y distribuirse sobre el suelo;
  • El estiércol, el superfosfato doble en gránulos y la sal de potasio también se combinan en una sola mezcla; esta es una opción alternativa para fertilizar el suelo antes de plantar ajo;
  • Compost, superfosfato y nitrofoska: una solución nutritiva adecuada para el ajo.

La elección del fertilizante depende totalmente de usted. El tamaño del terreno donde planea sembrar las semillas de hortalizas es de suma importancia. En función de esto, elige la solución nutritiva para el suelo. Recuerda preparar la tierra con antelación. Si vas a plantar ajo tierno, debes fertilizar la tierra en otoño.

Aterrizaje

Los jardineros experimentados saben cómo obtener una buena cosecha de ajo: es necesario no solo preparar y fertilizar la tierra, sino también asegurar una correcta siembra. Si planeas un huerto de 100 metros cuadrados, se recomienda elegir variedades de ajo de invierno. Plantarlas garantizará una cosecha abundante en otoño. Sin embargo, esto no se recomienda si en tu región se esperan heladas intensas (por debajo de -30 grados Celsius) en invierno. En ese caso, es mejor elegir variedades de primavera.

Una correcta siembra del ajo garantiza una cosecha abundante.

Inmediatamente antes de plantar las plantas en su ubicación definitiva, se recomienda tratar el material de plantación con una solución de ceniza de madera.

Si te has decidido a sembrar ajo tierno, no esperes a que la tierra de tu jardín se caliente. Normalmente se siembra a principios de primavera. Para ello, cava pequeños surcos y presiona las semillas de ajo a mayor profundidad. No las aprietes demasiado: en cuanto la planta empiece a desarrollar sus raíces, se asentará un poco más.

En cuanto a las variedades de ajo de invierno, la técnica de siembra es prácticamente la misma. Sin embargo, el momento de la siembra es crucial. Si se siembra el ajo en interior demasiado pronto, por ejemplo a mediados de septiembre, los brotes emergerán antes de que llegue el frío, lo que resultará fatal para la planta (la primera helada puede destruir los brotes). Lo mejor es sembrarlo entre mediados y finales de octubre. Además, asegúrese de tener mantillo en su jardín; esto proporcionará una buena protección invernal para el ajo.

Cuidado

Se puede obtener una buena cosecha en tan solo cien metros cuadrados. La clave está en cuidar adecuadamente las plántulas. ¿Qué implica esto exactamente? Significa controlar la humedad del suelo, aplicar fertilizantes a tiempo y protegerlas de enfermedades y plagas. No es necesario emplear técnicas agrícolas complejas. Lo fundamental es comprender los principios básicos, esenciales para quienes desean obtener una cosecha abundante.

En cien metros cuadrados se puede cosechar una cantidad decente de ajo.

Riego

Lo primero que un agricultor debe tener en cuenta al cultivar ajo en su huerto es el riego. Dado que el suelo no siempre está saturado de humedad debido a la falta prolongada de lluvias, el jardinero debe reponer el déficit hídrico. El riego regular no solo acelera significativamente el crecimiento de la planta, sino que también reduce el riesgo de plagas. Si bien generalmente se suspende el riego durante el período de maduración (esto garantiza que el ajo maduro conserve su sabor por más tiempo), el ajo requiere una cantidad considerable de humedad en el suelo durante mayo y junio.

Fertilizante superficial

Para sembrar y, sobre todo, obtener una abundante cosecha de ajo cultivado en casa, es necesario fertilizar la tierra a tiempo. Las mezclas orgánicas son especialmente importantes. Generalmente, se recomienda fertilizar una hectárea de tierra aproximadamente 2 o 3 semanas antes. Para ello, mezcle los siguientes ingredientes:

  • nitrógeno;
  • fósforo;
  • Fertilizantes potásicos.

Algunos agricultores están mucho más dispuestos a comprar mezclas especiales en la tienda para luego aplicarlas como fertilizante radicular, pero aquí todo depende de tus preferencias.

Fertilizantes potásicos para el ajo

Tratamiento y protección

Por mucho ajo que siembres, si no prestas mucha atención al tratamiento de enfermedades y plagas, es poco probable que los resultados sean buenos. Ciertamente contiene una gran cantidad de sustancias biológicamente activas, lo que sugiere que este cultivo es bastante resistente a enfermedades y plagas. Sin embargo, es imposible protegerlo de todas las amenazas.

Amarilleamiento de las hojas de ajo

A veces, los tallos de las plantas se ponen amarillos de repente. Esto se debe a una razón, generalmente a la falta de humedad en el suelo. En ocasiones, el problema se origina por la carencia de nutrientes. En este caso, puede ser útil aplicar una solución nutritiva especial mediante fertilización foliar. Recuerda este procedimiento para el futuro.

El ajo se pone amarillo por falta de riego.

Nota para el jardinero

Para comprender mejor los beneficios de cultivar ajo en tu jardín y para entender mejor el proceso, vale la pena explorar los siguientes puntos:

  • La zona donde se siembren las semillas de hortalizas debe estar bien iluminada;
  • Es de destacar que, en condiciones favorables, se pueden cosechar hasta 150 kg de cultivos por 1 hectárea de tierra;
  • Recuerda que las variedades de ajo de invierno se consideran mucho más productivas, pero la variedad de primavera conserva durante más tiempo tanto sus cualidades nutricionales como su sabor;
  • Es muy importante eliminar los tallos florales durante el proceso de crecimiento de la planta;
  • El ajo de invierno, al igual que el ajo de primavera, se considera resistente a enfermedades y plagas. Sin embargo, no deben descuidarse los tratamientos preventivos para el material de siembra.

Siguiendo las recomendaciones básicas para cultivar ajo en tu jardín, obtendrás una buena cosecha incluso en una sola hectárea. La clave está en cuidar las plántulas de ajo desde el principio. De esta manera, podrás cultivar ajo en tu jardín sin esfuerzo.

Vídeo: "Guía para el cuidado del ajo"

Este vídeo te enseñará cómo cuidar adecuadamente el ajo para aumentar su rendimiento.

Pera

Uva

Frambuesa