Enfermedades y plagas comunes de los albaricoqueros y cómo tratarlas
Enfermedades
Las enfermedades del albaricoque se dividen en virales, bacterianas y fúngicas.
Las bacterias y los virus atacan el árbol desde dentro. Estas enfermedades del albaricoque provocan decoloración de las hojas, sequedad y pudrición de la fruta. Los hongos fitopatógenos se alimentan de la materia orgánica de la planta afectada, causando su marchitamiento. El micelio crece dentro de las hojas u otras partes del árbol, formando una capa algodonosa en su superficie.
Analicemos las enfermedades comunes de los albaricoqueros y sus tratamientos.
Monilosis
La enfermedad presenta dos formas.
La moniliosis se produce durante la floración. Se desencadena por un invierno cálido y una primavera húmeda. Las flores se pudren, la madera se torna marrón y muere. Finalmente, todas las ramas floridas se secan. Como parte del control, se eliminan las partes infectadas de la planta y se trata el árbol con caldo bordelés (3%) o oxicloruro de cobre (0,9%).
En verano, la podredumbre de la fruta provoca la aparición de manchas marrones con una capa blanquecina en los albaricoques. Estas manchas se extienden hasta cubrir toda la fruta. Finalmente, los albaricoques se marchitan y se pudren. El tratamiento incluye la pulverización con caldo bordelés, Nitrafen, Confidor y Horus. También se utiliza una solución de yodo al 5%: 10 ml por cada 10 litros de agua. La solución de yodo es más eficaz como medida preventiva.
Como medida preventiva, es necesario realizar podas y fertilizaciones oportunas (con ácido bórico, solución de manganeso, etc.).
Fusarium
Aparecen manchas ligeramente hundidas de color gris parduzco en las hojas y luego en la fruta. La piel de los albaricoques se arruga y la pulpa se seca. La enfermedad afecta a árboles debilitados o dañados, por lo que es importante seguir las prácticas agrícolas adecuadas y aplicar fertilizantes, como el ácido bórico. ¿Qué tratamiento se debe usar para salvar el árbol? Use Fitosporin-M, Mikosan-V o Trichodermin.
Citosporosis
Si las puntas de los brotes se marchitan y aparecen vetas marrones en la corteza, lo más probable es que se trate de citosporosis. La infección se propaga de las ramas jóvenes a las más viejas, provocando finalmente que todo el árbol se seque. El tratamiento de la citosporosis solo es posible en sus primeras etapas. Se podan las ramas secas, eliminando el tejido sano. La herida se trata con brea. Es importante realizar una poda sanitaria preventiva y un tratamiento con fungicidas (como el hongo homínido). No olvide fertilizar (con ácido bórico, etc.).
marchitamiento por Verticillium
Los jardineros principiantes a veces se preguntan por qué las hojas de sus albaricoqueros se pusieron amarillas y comenzaron a caerse a principios de junio. La marchitez por Verticillium podría ser la causa. Esta enfermedad puede provocar la caída de casi todas las hojas durante el verano, con la excepción de algunos grupos. Para diagnosticarla, corte una rama y examine la superficie de corte: manchas marrones irregulares, que a veces se unen formando un anillo, indican la presencia de la enfermedad. Cabe mencionar que estas manchas pueden aparecer incluso sin que se produzca la caída de las hojas.
La segunda pregunta: ¿cómo tratar esta enfermedad? Entre los medicamentos adecuados se incluyen Topsin-M, Vitaros, Gliocladin y Rovral.
Clusterosporiasis
La mancha foliar por Clasterosporium, también conocida como mancha perforada del albaricoque, se caracteriza por la aparición de pequeñas manchas redondas en las hojas. Estas se secan rápidamente y se desprenden, dejando numerosos agujeros en el limbo foliar. En casos graves, el albaricoquero pierde las hojas agujereadas. Esta enfermedad también provoca la aparición de exudados de goma en el árbol, y el fruto se deforma y presenta numerosos agujeros.
La presencia de clasterosporium se puede detectar en primavera: una sustancia gomosa que aparece en los brotes inunda algunas yemas, provocando que se oscurezcan e impidan su apertura. Se recomienda inspeccionar la planta con frecuencia, ya que el clasterosporium tiene más probabilidades de eliminarse en sus primeras etapas. Para ello, se puede utilizar caldo bordelés o sulfato de cobre al 1%. Se deben eliminar todas las partes de la planta afectadas por el clasterosporium.
El hongo de Vals
Las esporas penetran en la planta a través de heridas no tratadas. La enfermedad provoca la aparición de úlceras en la corteza, generalmente de color amarillo ámbar. A menudo, la causa es una poda inadecuada o inoportuna (por ejemplo, durante el período de reposo vegetativo). Para curar la planta, se recomienda tratarla con Switch (10 g por 10 litros de agua) cada 7-10 días. Suspenda el tratamiento unas semanas antes de la cosecha.
Rizo de hoja
Existe otra razón por la que las hojas del albaricoque se vuelven amarillas: el enrollamiento de las hojas.
La enfermedad provoca la aparición de zonas amarillentas en las hojas del albaricoque, que se oscurecen hasta adquirir un color rojo intenso. Las hojas se enrollan y se deforman, desarrollando tumores rojos con aspecto de ampollas. Las hojas y los frutos se caen en masa. Los brotes jóvenes se deforman.
Si las hojas se ponen rojas, elimine inmediatamente todas las ramas afectadas. Los productos que contienen cobre pueden ayudar a salvar la planta. Es fundamental un cuidado adecuado del árbol, que incluya la fertilización con ácido bórico.
mancha marrón en la hoja
Otra razón por la que las hojas se ponen amarillas.
Inicialmente, el amarilleamiento se manifiesta como pequeñas manchas difusas. Estas áreas se expanden, se tornan rojas, se oscurecen y, finalmente, afectan a toda la hoja. Con el tiempo, las hojas afectadas se caen. Los frutos infectados se deforman y a menudo se caen antes de madurar.
Para combatir el amarilleamiento, después de eliminar las áreas afectadas, el árbol y el suelo subyacente se tratan con caldo bordelés, sulfato de cobre (1%) o Nitrafen.
Necrosis bacteriana
Esta infección también se denomina cáncer bacteriano y es una de las enfermedades más peligrosas de los albaricoques.
Al principio, aparecen manchas negras en diversas partes de la planta. Gradualmente, estas se agrandan. En las zonas ennegrecidas aparecen úlceras que supuran resina. La corteza se torna marrón y muere.
Las ramas infectadas deben cortarse, conservando algo de tejido sano, y quemarse. Trate el árbol con Fitolavin. Si la planta no puede salvarse, lave la tierra con lejía (200 g por metro cuadrado).
flujo gingival
Si la goma de mascar gotea por una razón distinta a las mencionadas (no hay otros síntomas), el problema podría deberse a un clima, condiciones meteorológicas o suelo inadecuados. Tras retirar la goma, recorte el tejido muerto, trate la herida con sulfato de cobre al 1 % o un producto con yodo y séllela con cera. Recuerde seguir las prácticas de cultivo y fertilización adecuadas (ácido bórico, fertilizante yodado, etc.).
Si la causa es un exceso de cal en el suelo, regar con una solución ligera de permanganato de potasio durante toda la temporada ayudará.
Costra
La sarna es una enfermedad común de los albaricoqueros. Los primeros síntomas son manchas verde oscuro en el follaje, generalmente redondas, que pronto se oscurecen hasta volverse marrones. La lesión puede extenderse y cubrir toda la hoja, tras lo cual se seca y se cae. Los brotes infectados se secan. En el fruto aparecen manchas duras, grises o marrones.
¿Qué se debe hacer si se detectan los primeros síntomas de la enfermedad? Utilizar preparados que contengan cobre o fungicidas sistémicos (Hom, Topsin-M, Skor).
Plagas
El siguiente punto trata sobre las plagas comunes del albaricoque y cómo controlarlas.
Áfido
En los albaricoqueros, los pulgones se adhieren al envés de las hojas y succionan su savia. Esto provoca que la lámina foliar se seque y se enrosque gradualmente. Los brotes jóvenes se deforman y la producción disminuye. Sin tratamiento, estas plagas pueden causar la muerte de un albaricoquero adulto o un plantón.
Veamos cómo combatir los pulgones en los albaricoques.
Si solo hay unos pocos parásitos, puede eliminar los pulgones recogiéndolos a mano.
Plantar cerca de plantas como manzanilla, caléndulas y cebollas proporciona protección natural contra los pulgones. Si no quieres usar productos químicos, puedes eliminarlos con insectos depredadores como las mariquitas o las crisopas. Las hormigas, que se alimentan de las secreciones dulces de los parásitos, favorecen la reproducción de los pulgones.
En caso de infestación severa, se puede salvar el árbol de los pulgones utilizando productos químicos (Fitoverm, Aktofit, Fufanon, Aktara).
polilla de la manzana
Una pequeña mariposa cuya oruga daña la fruta. Las larvas suelen pasar el invierno en un capullo, alrededor del tronco del árbol o en grietas. Trate la planta infectada con Entobacterin (0,5 %) o Clorfos (0,2 %). Además, fabrique trampas con cartón corrugado, arpillera o cinta adhesiva.
Enrollador de hojas
Un pequeño insecto de color marrón beige. Las orugas se alimentan de brotes, flores, hojas y tallos jóvenes. Para controlarlas, retire las hojas enrolladas (contienen larvas en fase de pupa). Rocíe con Fitoverm o Akarin y, en caso de infestaciones severas, utilice piretroides.
insecto escama de coma
El insecto mide entre 3 y 4 mm y tiene forma de coma (se estrecha hacia la cola). Su escudo marrón se asemeja a una protuberancia en un árbol. Se alimenta de la savia de los árboles, que se seca. En invierno, la hembra deposita los huevos bajo el escudo, que se torna marrón oscuro y muere. Las larvas eclosionan en primavera a 8 °C. Para su control se utilizan plaguicidas (como Fufanon, Calypso y Aktara), y Fitoverm es un tratamiento biológico.
Caja de cristal
Una mariposa con alas transparentes que deposita sus huevos cerca de las yemas. La larva perfora la corteza y se desplaza por el interior de la rama, alimentándose de ella. Naturalmente, la rama muere. Para su control, utilice Fitoverm, Akarin y Lepidocid. Controle los brotes jóvenes y córtelos si se secan.
polilla rayada de la fruta
Una mariposa con alas gris oscuro. Las orugas se alimentan de brotes, frutos y el centro de los tallos jóvenes. En primavera, utilice DNOC (1 %) o Nitrafen (3 %) para su control. Una semana después de que finalice la floración, rocíe la planta con Karbofos (0,3 %), Metatión (0,15 %) o Metafos (0,2 %).
Vídeo "Enfermedades de los árboles frutales"
Este vídeo te informará sobre las enfermedades que pueden sufrir los árboles frutales y cómo tratarlas.








